Carriles de aceleración. Manual de uso

Los carriles de aceleración son unos viejos conocidos que contribuyen a suavizar la fluidez de entrada a las vías de capacidad media y alta. Junto con los carriles de deceleración, que son sus hermanos simétricos en forma y función, son una de las mejores medidas a nivel de infraestructura en determinados cruces o incorporaciones a nivel. Claro, que hay que leer el «asterisco» de lo que escribo, son una de las mejores medidas si se saben emplear. Y eso es algo que millones de personas no saben hacer, creando innecesarias situaciones de riesgo.

 Un carril de aceleración es un carril especial, de longitud limitada cuya misión es dar la opción a los vehículos que se incorporan a una determinada vía de media o alta capacidad a equilibrar su velocidad en la medida de lo posible con la de los vehículos que circulan por la vía principal, para así poder incorporarse a la vía en condiciones de alta seguridad. La preferencia en un carril de aceleración es siempre para los vehículos que circulan por la vía principal, aunque estos tienen, en la medida de lo posible, la recomendación vinculante de facilitar la maniobra a aquellos que se quieren incorporar a la vía principal.

 Pues hete aquí que hay cantidad de conductores que no saben «comportarse» en un carril de aceleración, creando situaciones de riesgo innecesario que en no pocas ocasiones derivan en accidentes o averías, muchas veces en forma de pinchazos ocasionados por la escasa limpieza de los arcenes de las carreteras españolas.

 El carril de aceleración suele estar presidido por una señal al principio del carril, por regla general en el punto en el que la dirección y sentido del carril y de la vía principal se vuelve coincidente, en la que un mismo mástil contiene a la señal R-1 (Ceda el paso) y la R-400c, sentido obligatorio en línea recta. Además se suele acompañar en algunos casos por la R-303 (prohibición de girar a la izquierda) y la R-101 (Entrada prohibida) visible en sentido contrario. Se suele complementar con señales de información del tipo de vía al que te incorporas (con lo cual se conoce, por ejemplo, qué límite de velocidad deberás aplicar).

Mucha gente, erróneamente, se pasea despacito por el carril de aceleración, llegando al final del mismo sin opción de incorporarse, viendose obligado a detenerse o a invadir el arcén, circulando por el mismo hasta que se incorpora. Debo recordar que está prohibido circular por el arcén en condiciones normales, además de ser muy poco recomendable porque los arcenes en españa son un nido de peligros que pueden acabar en forma de pinchazo, reventón o perdida grave de adherencia por la gravilla que contienen. Eso es la forma de NO emplear el carril de aceleración. La que crea peligros, situaciones de riesgo y la que algunos «buenos conductores» descritos en mi anterior artículo emplean para incorporarse.

 Muchos conductores, actúan de esa forma porque no tienen la visibilidad adecuada, ya que olvidaron de qué forma hay que ajustar los espejos del vehículo. Y entonces se crea una situación de incertidumbre que da como resultado lo arriba descrito. Otros intentan incorporarse a velocidades irrisorias porque piensan que acelerar el coche hasta las 3000-3500 rpm en 3ª marcha (lo que es alcanzar unos 80-90 kms/h) para liberar potencia es una tortura para el motor y se les puede averiar.

 La forma más segura de incorporarse a una vía en un carril de aceleración es empezar despacio, a unos 30 o 40 kms/h si es necesario, a la altura de la señal de ceda el paso (inicio de carril), que son 2000-2500 rpm en 2ª marcha (motor en regímenes medios con brío para subir de vueltas). Circular a esa velocidad hasta que se vislumbre que el «hueco lo suficientemente grande» se aproxima, y cuando lo tienes a unos 100 metros a tu espalda (si miras al retrovisor lo podrás observar), entonces acelerar con brío, para poner el coche a unos 100-110 kms/h (velocidad de incorporación mínimamente segura en autovía-autopista). Ese lapso, dependiendo del coche y sin apurarlo demasiado, pueden ser unos 7-8 segundos, en los cuales se recorren unos 120-140 metros, que es bastante menos de la longitud de un carril de aceleracion al uso. es decir, que el carril no tiene por qué acabarsete. Naturalmente esta maniobra debe hacerse utilizando el intermitente que apunta hacia la vía principal a la que te quieres incorporar. Con un poco de suerte el que circule por el carril derecho de la vía principal se cambiará al carril izquierdo facilitandote la maniobra. De esa manera habrás empleado el carril como lanzadera, equilibrando la velocidad con la del tráfico de la vía principal, evitando frenazos, maniobras de esquiva o accidentes graves por la diferencia de velocidad del que circula por la via principal y del que se quiere incorporar (cuanto más pequeña es la diferencia de velocidad entre el tráfico de la vía principal y de quien se quiere incorporar, más lejano es el riesgo de sufrir un accidente). Es decir, actuar de manera diligente a la hora de incorporarse.

 Naturalmente deberemos también adoptar unas medidas «higienicas» para cuando circulamos por la vía principal. Para minimizar la existencia de situaciones de riesgo, deberemos facilitar la incorporación de los del carril de aceleración. Para lo cual un cambio de carril (si es posible) es la mejor opción. Cuando no es posible, si se es lo suficientemente atento y previsor, bastará con levantar el pie del acelerador y ralentizar 20 kms/h para que el incorporado tenga buen hueco para entrar. Naturalmente, no es NADA RECOMENDABLE (y si yo fuera legislador lo prohibiría) retornar a un carril derecho en el área de influencia de un carril de aceleración para favorecer la incorporación segura de los que quieren acceder a la vía principal.

 Lamentablemente, en algunas vías de alta capacidad, generalmente en los entornos de aglomeraciones urbanas, los carriles son más cortos y las entradas más «a cuchillo». la fluidez del tráfico y por tanto, la seguridad, estriba en no parar, si es posible. Para lo cual, y previendo que el carril sea corto (para lo cual muchos «buenos conductores» deberán quitarse las orejeras), se debe ralentizar (evitando parar para obtener una respuesta diligente dos coche) la velocidad antes de la incorporación y «buscar» el hueco, y una vez se ha divisado ese «hueco que se aproxima», adaptarnos a la velocidad del tráfico y colarnos de una forma segura.

 Así resumo.

1- Se cede el paso ANTES del carril, no después. Naturalmente evitando parar o circular a velocidades ultralentas de dificil recuperación.

2- No hay que tener miedo a acelerar el coche, es lo seguro. Señalizar correctamente, tener perspectiva y actuar con diligencia es la principal premisa.

3- Y si circulamos por la vía principal, facilitar la maniobra. Tener la preferencia no supone imponerla a quien se quiera incorporar restándole seguridad.

 Un saludo muy cordial, espero haber sido didáctico…

 Lothar

Autor: Lothar

3 ideas en “Carriles de aceleración. Manual de uso

  1. Cierto… pero como en otras muchas cosas en el uso de estos carriles se da uno cuenta de las carencias alarmantes que muchos conductores (y ellas también) presentan a la hora de manejarse por la carretera. La gente sigue pensando que ya sabe conducir por el hecho de saber pisar el ambrague, meter las marchas y dar los intermitentes.
    Hoy mismo en la autovia viniendo de Munguia he sufrido una escena típica de lo que es topar con una persona (ella en este caso)que no sabe conducir.
    Situación: yo circulo a unos 110 por el carril de la derecha y me acerco a la confluencia con un carril de aceleración que me viene por la derecha como es normal y en el que veo que viene un Audi A4 rojo (de los antiguos)y que vamos a coincidir mas o menos paralelos en el momento en que a ella se le acabe el carril y tenga que entrar en el mío por cojones. En estas situaciones a mi me gusta adelantarme a la situación y colorcarme en el carril izquierdo y facilitar la entrada del que viene por el carril de entrada, aunque éste tenga que ceder el paso.
    Pues bien esta vez no ha sido posible porque por el carril izquierdo venia adelantando un coche más rápido y lógicamente yo lo tengo que dejar pasar y no puedo entrar ahí.
    ¿Vosotros os creéis que la chavala ha visto la situación con antelación y ha analizado que todo nos llevaba a confluir a los tres coches en dos carriles justo cuando a ella le tocaba entrar?

    Pues no, ni jarta de grifa, no ha ni siquiera, frenado… como si tuviera todo el derecho ha entrado de seguido en el carril y como yo me la olía he frenado mucho antes y la he dejado entrar para ponerme rápido detrás del coche que venía por el carril de mi izquierda.
    Ella ni se ha inmutado: IMPASIBLE iba hablando con su acompañante y lo más gracioso de todo es que ni ella ha analizado las circustancias ni tampoco se ha enterado de nada de lo que ha pasado. Son apenas unos segundos lo que he contado aquí pero que demuestran que la niña no tiene ni puta idea de lo que se trae entre manos y que es un peligro público.
    Conclusión: no sabe conducir o conduce mal.

  2. casualmente, esa via, tiene en 500 metros, N633-BI631 tiene dos de los carriles de aceleración más peligrosos de Bizkaia.

    Uno es el de los que se incorporan sentido Mungia de los que vienen de Zamudio por el Txorierri. Un carril enano, y la vñia principal delimitada por línea contínua para separar los qe bajan de Santo Domingo de los que vienen del Txorierri procedencia de Erandio. Aunque es técnicamente ilegal lo que hago, numerosas veces me salto la línea contínua si no viene nadie de Santo Domingo y permito la salida segura de los que vienen de Zamudio por le Txorierri.

    Luego medio kilometro mas adelante está la incorporación de los que vienen de Derio por el ramal del Seminario. Otro carril de aceleración minúsculo que se incorpora a una vía principal que traza una curva relativamente cerrada a izquierdas. Eso provoca que la visibilidad de la vía principal cuando vas por el minicarril de aceleración sea prácticamente nula.

    Un saludo!!

  3. la informacion me parece muy interesante y es lo que yo estudie hace años en la autoescuela, A LA CUAL DEBERIAN MANDAR A MIEMBROS DE LA GUARDIA CIVIL DE TRAFICO POR NO SABER CONDUCIR NI SABERSE LAS NORMAS DE TRAFICO, pues ayer me paso algo parecido a lo descrito en el comentario anterior y encima era un COCHE DE LA GUARDIA CIVIL el que comete la infraccion con el agravante de que en la zona en cuestion habia obras 500 metros mas adelante y nos quedabamos en circulacion en doble sentido y a la entrada de un tunel, pues ni corto ni perezoso el señor agente acelera se me mete por su cara bonita obligandome a frenar haciendo que el vehiculo me viene por detras de mi casi me golpe y cuando le recrimino actitud con simple largazo se para en el acto a la entrada de dicho tunel repito circulacion en el tunel en doble sentido me amenaza y posteriormente me impone sancion de 60 euros por segun el haber acelerado menos mal que hay testigos del otro vehiculo y sera recurida la multa y se pedira expediente sancionador para esos dos pistoleros de la carretera , un saludo a todos

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