La Encuesta de Condiciones de Vida ha quedado relegada en las parrillas de las portadas de las principales webs de información y en las páginas de los periódicos nacionales a los últimos lugares. Pero refleja una foto fija que no debería pasar inadvertida a los políticos y los agentes sociales. El estudio del INE es categórico y muestra la degradación del poder adquisitivo de las familias españolas. Cada vez más hogares tienen dificultades en llegar a fin de mes, el 7,5% en lugar del 4,7% de hace cinco años. La quinta parte de la población, un 20,8%, está por debajo del umbral de la pobreza relativa (es decir sus ingresos no superan el 60% de la media nacional).
Son números que enmascaran miles y miles de tragedias que ha traído la crisis económica y que deberían ilustrarse con «las caras de la noticia», pero que quedan edulcorados en la «puritita estadística». Según las conclusiones de los expertos del INE, la crisis se ceba con los mayores de 65 y los menores de 24 años.
Pero, el informe parece que se queda corto. Seguramente sea por la «sensación térmica» que tenemos los ciudadanos de la crisis: no parece más aguda de lo que es en realidad. Sucede lo mismo cuando bajan las temperaturas. El caso es que cada vez más gente está fuera del mercado laboral y cada vez hace más frío fuera. Nadie duda del rigor de los datos de la encuesta, que es, no olvidemos esto una encuesta. Pero si sumamos los hogares con todos sus miembros en paro, 1,3 millones, si miramos los datos de desempleo, cuatro millones, se hace difícil pensar que la cifra se queda en uno de cada cinco españoles. Más difícil se hace pensar que con esas magnitudes los ingresos de los españoles se hayan reducido sólo un 2,9%. Qué manera más burda de camuflar la realidad. Tiene que ser más… Si no, ¿cómo es posible que casi la mitad, 39%, de los españoles no pueda salir una semana de vacaciones al año? O que otros tantos hogares no puedan afrontar los imprevistos, que siempre los hay.
Si tuviéramos que hacer una estimación de la sensación térmica de la situación de las familias, yo diría que ese 20% de hogares por debajo del umbral de la pobreza se transforma en casi un 40%. Para llegar ahí, creo que basta hacer un pequeño calculo mental: cuatro millones de parados (que trasladado a hogares bien podría tener un efecto multiplicador del 1,5), otro millón más de parados que están en cursos de formación, el colectivo de personas mayores y de jóvenes que se citan en la información… Por no hablar de los que tienen trabajo todavía y se han puesto a ahorrar y devolver créditos como locos… Las privaciones de las familias españolas son mayores de lo que las estadísticas no quieren hacer ver.
Mi sueldo con respecto a mi anterior curro se ha reducido en 5000-7000 euros bruto año.
No es por pretender saber lo que ganas pero tendrias que poner lo que ganabas antes y ahora, si ganabas antes 30.000 y ahora 25.000 pues es una cosa, pero si antes ganabas 18.000 y ahora 13.000 es otra muy distinta. 🙂
Eso lleva pasando en este pais de años atras, eso no es la crisis, eso viene antes. Entre sindicatos negociando los convenios colectivos «ventajosisimos» para el currela y empresas pretendiendo cada vez pagar menos y que el currela haga mas, pues pasa eso que acabas de decir.
Seamos sinceros la crisis va por barrios y me explico ¿Que crisis tiene un jubilado que gana el máximo? ¿Que crisis tiene el trabajador que gana bien y no peligra su puesto de trabajo? la respuesta es NINGUNA, y de estos existen muchos, familias donde el matrimonio trabaja ganando 2000 euros cada uno ¿Que crisis tienen estas personas? ninguna, es más, con la bajada de las hipotecas y de los precios posiblemente vivan mucho mejor que en 2005 que decíamos que España era de «champion ligue».
La crisis la padece el que se ha quedado en el paro, la crisis la padece aquel que no sabe si el día de mañana su empresa va a quebrar, la crisis la padece el mayor de 45 años en paro que sabe que esta condenado a paro crónico si el enchufe de algún amigo no lo remedia, la crisis la padece aquel cuyo puesto de trabajo peligra porque los jefecillos bobalicones solo saben arreglar los balances a base de reducir puestos de trabajo… esos son los que padecen la crisis.
Y lo mismo que las medias dicen que todos tenemos de media un Renault Laguna porque algunos tienen Ferraris y otros van a pata, y sacando la media sale un coche medio de gama alta, las estadísticas siempre han servido, primero para romperlas, y segundo para hacerse una «Paja mental» con ellas, y me explico.
Todos aquellos que hemos manejado estadísticas sabemos que casi todo se puede justificar con ellas, que metiendo o sacando, haciendo o quitando podemos casi obtener el resultado que buscamos (y sino que se lo digan a la DGT), pero donde verdaderamente se ve que esto no funciona es en la economía, que con estos políticos bobalicones la han enfriado de tal manera que incluso, aquellos que no tienen ningún problema en gastar dinero no lo hacen (los casos explicado anteriormente) por miedo a que «hay crisis»,y eso nos está matando.
En fin, lejos de ver la luz al final del túnel lo que veo es que estamos como aquellos mineros chilenos, enterrados sin salida con la diferencia que lejos de saber como sacarnos, simplemente esperan a que nos muramos, y con ello, se solucione solo el problema.
MAs bien lo primero Alvaro.