El IPC de mayo nos sitúa en una tasa interanual del 3,5 % y sigue poniendo a los trabajadores y sus familias en una situación acuciante. Mientras, el Gobierno, siguiendo los dictados de la UE, emprende una carrera de reformas vacías de contenido que no solucionarán el problema real de los ciudadanos, que es cómo llegar a fin de mes con los precios más altos y salarios más bajos.
Esto explica el estancamiento de nuestro crecimiento económico, pues esta falta de renta disponible en los hogares esta colapsando la demanda interna.
Si a esto le unimos el encareciendo de las hipotecas, como consecuencia de la subida del Euribor, la anunciada subida de los tipos de interés y un desempleo cercano al 21%, el resultado es un cóctel explosivo para los ciudadanos que encima tienen que oír que no se han producido recortes sociales.
Un IPC cuyo descenso en tres décimas este mes se debe a la bajada del precio de los carburantes, mientras productos básicos, como los alimenticios han alcanzado su mayor crecimiento desde noviembre de 2008. No hay que olvidar que todo el mundo necesita comer, y sin embargo no todo el mundo necesita el coche.
Pese a la disminución del IPC seguimos manteniendo el mismo diferencial con los países de la Unión Monetaria, lo que hace que nuestros productos sean menos competitivos.
Desde la USO le pedimos al Gobierno que se deje de discursos y reformas vacías de contenido, y emprenda un plan de rescate para los ciudadanos, que están siendo los sufridores de esta crisis que no han causado.
– Las reformas que pretende el Gobierno no solucionarán el problema de los ciudadanos, que es cómo llegar a fin de mes.
– Los productos alimenticios han alcanzado su mayor crecimiento desde noviembre de 2008. No hay que olvidar que todo el mundo necesita comer, y sin embargo no todo el mundo necesita el coche.
