El parque natural de Changge, en la provincia central china de Henan, ha inaugurado una carretera en la que los automóviles, al crear vibraciones en el asfalto, hacen sonar una melodía musical.
Cientos de finas bandas de frenado han sido colocadas en la carretera de tal manera que los coches, al pasar sobre ellas, producen vibraciones armónicas, que se pueden oír tanto en el interior como en el exterior del vehículo.
Los coches deben cruzar por el tramo musical, de 300 metros de longitud, a una velocidad mínima de 40 km/h para que suene la canción, que en una dirección es el himno nacional chino y en la otra es la tonada tradicional Molihua, muy conocida en el país.