Autor: USO

A pesar del incremento de 6 decimas respecto al mes anterior de nuestro IPC, este sigue en tasas negativas por sexto mes consecutivo, y la inflación subyacente sigue su ritmo descendente. Esto nos confirma que existe una deflación real de nuestros precios, fruto de la contención del gasto de las familias y la falta de confianza que hace que la poca liquidez existente vaya al ahorro y no al consumo.

Los últimos datos de Eurostat sobre el paro en la Unión Europea (UE) contradicen los facilitados por el Ministerio de Trabajo español: el desempleo en nuestro país marcó un nuevo récord al alcanzar en julio el 18,5%. Con estos datos a final de año se habrá llegado al 20% de tasa de desempleo en España.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció en su comparecencia en el Congreso de los diputados una subida de impuestos en torno al 1,5% de nuestro PIB (más de 15.000 millones) y algo más en ha concretado en Italia.

El descenso del Índice de Precios al Consumo en el mes de julio es fruto de la falta de confianza de los ciudadanos ante la inexistencia de medidas del Ejecutivo, a la recesión económica, que ya nadie discute, se suma el riesgo de deflación en la que están entrando los precios. Y si a ello se unen las expectativas de un incremento del desempleo en los próximos meses, todo ello supone un cóctel explosivo para situación de los trabajadores y sus familias que está suponiendo una reducción drástica del consumo por la falta de liquidez que siguen padeciendo los hogares y el que la tiene lo guarda por si vienen tiempos peores.

La Unión Sindical Obrera (USO) considera, que una vez más, las cifras que aporta el Ministerio de Trabajo no responden a la realidad que padece nuestro mercado laboral. Por mucho que se empeñe en vez síntomas de alivio, no puede olvidar la gravedad de la situación.

La Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios, de la que USO forma parte, ha elaborado un decálogo con una relación de argumentos a favor de la implantación de la jornada continua durante los meses de verano. Junto a la mejora de la productividad como medida contrastable, figuran el aumento de la motivación, la reducción del estrés o la optimización del tiempo.

La Unión Sindical Obrera (USO) quiere hacer notar sobre el dato de paro correspondiente al mes de junio, que la disminución del mismo, es fruto de un empleo absolutamente precario que tiene que ver con la estacionalidad. Los datos descontando este factor es que seguimos perdiendo empleo, más aún se incrementa el dato del pasado de mes de 88.594 en 107 trabajadores sin empleo.

La Comisión Europea, por medio del comisario de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia (ex-ministro español de trabajo), ha vuelto a echar un jarro de agua fria sobre los calculos económicos del Gobierno al hacer públicas sus previsiones de que la economía española se contraerá un 3,2% este año y un 1% en 2010, mientras que la tasa de desempleo llegará al 20,5% el año que viene y el déficit público se disparará hasta casi el 10% del PIB.

En estos términos Julio Salazar, Secretario General de USO, se ha dirigido a las decenas de miles de asistentes a la euromanifestación que ha recorrido este jueves el centro de Madrid convocada por la Confederación Europea de Sindicatos y las organizaciones españolas USO, CCOO y UGT.

La estadística ya no ha podido maquillar más las cifras: la encuesta de población activa (EPA) del primer trimestre de 2009 arroja un total de 4.010.700 parados. Un jarro de agua fría al Ejecutivo, que seguía cifrando el número de parados en 3.690.677 al finalizar el mes de marzo, algo que desde la USO negamos, ya que, según sus propios datos, las personas registradas en INEM en busca de una ocupación son 4.048.359, dato que se acerca más al que la EPA hace público en el día de hoy.

Estamos atravesando por la peor de las crisis que el mundo moderno conoce. No lo digo yo, lo dicen todos los analistas serios y mas objetivos y puntuales que todo tipo de expertos manejan y publican, tenemos un Gobierno que parece que todo el «Mundo-Mundial» (término utilizado últimamente por alguna Ministra) menos él, tiene la culpa de esta situación, es más ni tan siquiera reconocía que había crisis cuando empezaba y se empeñaba en decirnos que tranquilos, que esas cosas son habladurías de gente de «mal vivir» y que ellos nos garantizan bienestar, seguridad y tranquilidad.