Prácticamente, por cada uno de los principales barrios que conforman Basauri, se celebra al año unos días festivos, (Benta, El Kalero, San Miguel...) sin embargo las fiestas más populares de este pueblo son las celebradas en honor a San Fausto (13 de octubre), teniendo a la Escarabillera como amuleto festivo, y el zurracapote, como bebida típica, que preparan las quince cuadrillas pertenecientes a Herriko Taldeak, que sirven en porrón a todo aquel que se acerque por sus lonjas. El zurracapote es una bebida parecida a la sangría ya que está elaborada con vino tinto, limón, canela, algún tipo de licor, azúcar y, según cuenta la leyenda, condimentos inconfesables que muchos no querrían saber. La Escarabillera es un personaje basado en las mujeres y hombres que en Basauri (como en otros tantos municipios) iban, en épocas de mayor necesidad a comienzos del siglo XX, a las vías por donde circulaban los trenes de vapor (en sus cruces de vías) o a las escombreras de las empresas de fundición (Basconia) en busca del carbón que no había prendido en su totalidad (escarabilla), que luego utilizaban para cocinar en las antiguas cocinas de chapa. Así mismo, se llegó a utilizar el carbón para "asfaltar" muchas de las calles y sendas de este Basauri de principios de siglo XX. Por ese motivo es muy emocionante ver pasear a la escarabillera desde el principio de las fiestas hasta el fin cuando agarrada por globos y con un mensaje en varios idiomas se lanza al aire a la espera que alguien la recupere. Aunque en muchas ocasiones no se consigue devolverla, un año llegó hasta Praga a donde tuvieron que ir una de las cuadrillas a recuperarla.