La
enfermedad de Parkinson se manifiesta con una depresión en el 40 por
ciento de los casos, según ha estimado José Antonio Molina, neurólogo
del Hospital Doce de Octubre, de Madrid, que ha resaltado la importancia
de "identificar la enfermedad ante cualquiera de sus síntomas; no sólo
por el temblor, sino también ante otros rasgos definitorios como la
torpeza o discinesia".
Para
Molina, coordinador de la Jornada sobre Causas y Tratamiento de Diversas
Enfermedades Neurológicas, organizada por la Fundación Neurociencias y
Envejecimiento en el Hospital Doce de Octubre, de Madrid, "hoy en día
la enfermedad de Parkinson sigue diagnosticándose tal y como sugería
James Parkinson a principios del siglo XIX, a través de la observación
clínica; de ahí la importancia de conocer e identificar los síntomas
que la caracterizan". Aunque la tomografía por emisión de
positrones (PET) es el único adelanto tecnológico que permite hacer un
diagnóstico presintomático de la enfermedad, "apenas se utiliza en
la clínica diaria, debido a su alto coste", ha matizado Molina.
Sin
embargo, en otras áreas, como el conocimiento de los orígenes de la
patología o su tratamiento, la investigación en la enfermedad de
Parkinson sí ha aportado sustanciosas novedades: "Hoy por hoy se
admite que, al menos en los Parkinson juveniles, existe un componente genético
que actúa en consonancia con determinados factores ambientales que
aceleran el envejecimiento de determinados grupos celulares".
Dentro
del desconocimiento parcial de la etiología de la enfermedad, su
tratamiento ha avanzado notablemente desde que hace ya más de 30 años se
introdujera la levodopa: "Han aparecido otros fármacos como los
antagonistas dopaminérgicos o la selegilina, la única capaz de modificar
la progresión. A éstos se unen la cirugía o la estimulación celular
profunda con marcapasos", ha comentado Molina, que ha adelantado que
"en breve van a aparecer en el mercado español dos nuevos fármacos:
la cabergolina, un agonista D2 que permitirá la ingesta de una única
pastilla diaria, y la apomorfina, distribuida en una especie de bolígrafos,
similares a los de la insulina, que se podrá utilizar puntualmente cuando
el paciente se quede bloqueado".
A
pesar de las novedades, el neurólogo del Doce de Octubre ha hecho hincapié
en que todos los tratamientos existentes "siguen teniendo un carácter
paliativo, por lo que ninguno, salvo la selegilina, consigue variar la
progresión natural de la enfermedad". Sin embargo, Molina considera
que, "aunque no se conozcan las causas ni cómo detener la progresión,
un enfermo bien tratado puede vivir con muy buena calidad de vida al menos
los diez años siguientes al diagnóstico".
El
Parkinson ha sido una de las enfermedades, junto a la esclerosis múltiple,
las enfermedades cerebrovasculares y la enfermedad de Alzheimer y
demencias, que se han abordado en el transcurso de las jornadas.
Diario
Medico 24 de julio de 2002
Mutaciones
en el Park2 en Parkinson esporádico
La
presencia de una mutación en un único alelo del gen de la parkina
(Park2) podría ser un factor de riesgo genético para la presentación
del Parkinson ante determinadas agresiones ambientales o con el
envejecimiento, ha asegurado Janet Hoenicka, del Banco de Tejidos para
Investigaciones Neurológicas.
Los
resultados de la investigación que se ha publicado en
"Archives of Neurology" demuestran que los genes Park 1 y Park5
no están asociados a la enfermedad de Parkinson en España. Sin embargo,
el gen Park2 está muy implicado con la forma familiar de la enfermedad en
los casos precoces y también en los casos esporádicos. "Hemos
encontrado ciertas evidencias de que ser portador de una lesión en el gen
de la parkina podría ser un factor de riesgo para la forma esporádica de
la enfermedad de Parkinson", ha explicado la profesora Janet
Hoenicka, de la Unidad de Diagnóstico Molecular del Banco de Tejidos para
Investigaciones Neurológicas de Madrid.
Este
equipo de expertos, en el que también han participado los Servicios de
Neurología del Hospital Universitario San Cecilio, de Granada, del Príncipe
de Asturias, de Acalá de Henares, del Hospital Severo Ochoa, de Leganés,
del Ramón y Cajal, de Madrid, del Marqués de Valdecillla, de Santander,
y de la Fundación Jiménez Díaz, de Madrid, ha realizado un análisis
molecular de 19 familias españolas con enfermedad de Parkinson: 13
con forma recesiva, 4 con dominante y dos con una variante que no se puede
definir.
Tres
genes
El
estudio ha valorado molecularmente los tres genes que están implicados en
la enfermedad: dos asociados a formas dominantes (Park1 y Park5) y otro,
el gen de la parkina (Park2), en donde se han encontrado lesiones en el 50
por ciento de las familias con un patrón autosómico recesivo. Según
la coordinadora, las mutaciones en el gen Park2 se encuentran en cualquier
grupo étnico con Parkinson precoz. "Nosotros lo hemos incluido en el
diagnóstico de pacientes con enfermedad de Parkinson precoz".
Las
mutaciones en el gen Park2 constituyen el 38 por ciento de los casos con
enfermedad de Parkinson en España. La investigación ha localizado dos
casos portadores de una mutación Park2 heterozigótica simple que
desarrollan síntomas clínicos, incluso en las etapas adultas o después
de una leve exposición a agentes parkinsonizantes.
Los
investigadores consideran que la enfermedad de Parkinson hereditaria posee
un fenotipo clínico más variable y contiene más defectos moleculares
que los que se habían pensado con anterioridad.
"Hemos
descrito un caso de un individuo con una única mutación en Park2 que ha
desarrollado Parkinson con la edad y otro de un sujeto que con una sola
mutación puede desarrollar la patología al someterse a tratamiento
farmacológico".
La
experta reconoce que, aunque es un gen que en principio debe estar mutado
en ambos alelos para que se desarrolle la enfermedad, "la presencia
de una mutación en un único alelo del Park2 podría ser un factor de
riesgo genético para la presentación de la enfermedad de Parkinson ante
determinadas agresiones ambientales o con el envejecimiento". Ha
recordado que el concepto de factor de riesgo genético obliga a la
existencia de otros factores de riesgo genéticos y ambientales.
Nuevos
datos
Este
equipo se encuentra actualmente seleccionando pacientes con Parkinson
inducido por fármacos con el objetivo de analizar qué alelos
tienen del gen de la parkina y de otros genes. Asimismo, se están
investigando familias españolas sin mutaciones en el gen Park2, pero sí
en otro gen localizado en el cromosoma 1. "Identificado recientemente
su locus, sabemos que hay algunas familias en las que la lesión se
localiza en dicho locus, aunque no hemos identifi.........eñalado la
coordinadora.
Diagnóstico
molecular
La
Unidad de Diagnóstico Molecular del Banco de Tejidos para Investigaciones
Neurológicas ofrece la posibilidad de realizar un diagnóstico molecular
en las familias con presentación temprana de la enfermedad de
Parkinson de forma gratuita. "Siempre advertimos de que no se puede
asegurar que se va a poder obtener un hallazgo positivo con una certeza
del 100 por cien.....ciados con la enfermedad", ha asegurado Janet
Hoenicka, de la Unidad de Diagnóstico Molecular del Banco de Tejidos para
Investigaciones Neurológicas, de Madrid.
No
obstante, en el caso de las familias de presentación temprana se sabe que
al menos el 50 por ciento de las familias en España tienen mutaciones en
la parkina y otra grupo puede sufrir alteraciones en el gen localizado en
el cromosoma 1. "Cuando se haya identificado dicho gen, es posible
que podamos hablar de un diagnóstico molecular más sólido en el sentido
de ofrecer una respuesta más específica".
Con
este método se pueden detectar los pacientes asintomáticos.
"Siempre se realiza con el consentimiento informado del paciente, ya
que se advierte que se va a analizar el ADN
Diario
medico 24 de julio de 2002
Un
nuevo injerto de células extraadrenales consigue buenos resultados en el
Parkinson
Un
grupo de científicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de
Sevilla ha obtenido buenos resultados en relación con un nuevo
tratamiento quirúrgico para el Parkinson al lograr "mejoras
significativas" en los ensayos iniciales en ratas. Emilio Fernández
Espejo, director del grupo de Neurobiología de Opiáceos y Aminas Biógenas
que ha emprendido este proyecto, ha explicado que la nueva técnica
consiste en introducir en la zona cerebral dañada un tipo de células que
detienen y reducen la lesión de los tejidos que acompañan al proceso
degenerativo
del
Parkinson.
En
concreto, se trata de trasplantar células extraadrenales del paraganglio
de Zuckerland del propio paciente que segregan unas sustancias denominadas
factores tróficos. Estas sustancias son capaces de mantener la
supervivencia de las células cerebrales e incluso de regenerar el tejido
nigroestrial, cuyo deterioro afecta principalmente a la función motora
del.
Según
Fernández Espejo, estas sustancias "no se pueden ingerir ni
inyectar, por lo que la única solución es el trasplante. La razón es
que hay que aplicarlas directamente en el núcleo del encéfalo, también
llamado sustancia negra. Esta línea de estudio se inició en 1998 y,
posteriormente, se han desarrollado los ensayos en ratas.
El
grupo ha comprobado que aproximadamente el 13 por ciento de las células
trasplantadas en las ratas ha sobrevivido, logrando además regenerar el
tejido del núcleo estriado, zona cerebral que participa en el control del
movimiento y principal afectada por el Parkinson. "Creemos que esta
nueva intervención quirúrgica es una alternativa de trasplante, ya que
nuestras investigaciones han proporcionado resultados positivos, teniendo
en cuenta que los efectos del Parkinson en ratas son muy similares a los
de los seres humanos y que el grado de mejoría de éstas fue muy
significativo".
La
técnica ofrece dos ventajas añadidas: se trata de autotrasplantes, dado
que las células extraadrenales se obtendrían del propio paciente, lo que
elimina los riesgos de rechazo. "Además, no hemos observado a largo
plazo ningún efecto secundario en las ratas de ensayo". Fernández
Espejo ha adelantado su intención de comenzar los ensayos en primates,
animales que tienen, al igual que el ser humano, dos paraganglios de
Zuckerland, para pasar a los ensayos con humanos dentro de un año si los
resultados son positivos.
Opciones
El
trasplante de células extraadrenales del paraganglio de Zuckerland sería
una alternativa alo quirúrgico que se aplica actualmente en la mayoría
de los hospitales y que consiste en lesionar una serie de centros en el
cerebro a través de un electroestimulador. También es una opción a los
injertos de células dopaminérgicas, que son principalmente fetales. Las
células dopaminérgicas se introducen en el estriado para que liberen
dopamina, la misma sustancia que pierden las neuronas dañadas por el
Parkinson y cuya función es activar las neuronas que
regulan
sobre todo el movimiento.
Según
Emilio Férnandez Espejo, "esta línea está muy en entredicho
actualmente porque al no poder controlar la liberación de dopamina
existe el riesgo de que se libere en exceso y, por tanto, también se
produzcan en el paciente alteraciones motoras incontroladas".
Asimismo, el trasplante de estas células -fetales o adrenales- no
procedería de los propios pacientes, "por lo que también existe
un riesgo de rechazo". En cualquier caso, ha advertido de que las
intervenciones quirúrgicas en el Parkinson únicamente deben realizarse
cuando la terapia farmacológica deja de ser efectiva.
Mas
noticias en:
Septiembre
- Octubre 2002