Suele pasar que cuando vas a pintar un paso de cebra, y presuntamente no se ha avisado, hay algún coche aparcado, entonces claro, a la acción de pintar se le añade un obstaculo que entorpece la labor. Ante igual cabría pensar que lo lógico es volver en otro momento, pero no, lo lógico en este caso es proceder como podemos ver en las imágenes que me han enviado.