Milán es la última ciudad europea que ha anunciado la introducción en sus calles de las llamadas Zonas-30, apoyándose en la Estrategia Europea de Seguridad Vial 2011-2020. Estos nuevos límites de velocidad en las Zonas 30 –que entrarán en vigor el próximo mes de marzo–, además de buscar el calmado del tráfico y la reducción de la contaminación, se inscriben dentro de un movimiento de incremento de este tipo de zonas de velocidad reducida en las principales ciudades europeas.
Así, recientemente fue Glasgow (Escocia), quien extendió al 80% de sus calles las zonas limitadas a 20 millas por hora (unos 32 km/h), incluído el centro histórico. Igualmente, París (Francia) anunció el pasado verano un plan para incrementar de forma importante el número de zonas de velocidad reducida en su ámbito ciudadano. “Con la ‘Zone 30’ –ha dicho el Asesor de Movilidad Pierfrancesco Maran– no solo queremos un área más segura,en particular protegiendo el uso de la circulación en bicicleta o a pie, sino valorizar la ciudad, invitando a recorrer lugares maravillosos de Milán, con sus monumentos, plazas, monumentos arqueológicos».
En esa misma línea, se ha anunciado que en el Reino Unido unos 13 millones de personas viven en zonas en las que las autoridades locales han implantado (o están a punto de hacerlo) zonas de velocidad limitada a 20 millas/h (unos 32 km/h). También el 38% de la población suiza vive en zonas 30, según un informe del BfU, miembro suizo del ETSC (Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte).
