El otro día pude comprobar en reunión familiar que la batalla está perdida. Hemos dejado a la DGT y a Camarada Comisario plantar la semilla de la ignorancia, hemos dejado que programen el cerebro de la sociedad y de tonta que se ha vuelto la misma ya cabrea.
Como dije, en una comida familiar pero sin familia (es decir, un montón de amigos con sus respectivas familias) poco más que se me quiso crucificar como al cristo de la pasión porque intentaba defender el poder viajar por carretera a 160… que si inconsciente, que si loco, que si no tenía respeto por la vida… aquello se convirtió como en una especie de anuncio de la DGT delirante en los argumentos “correr es de locos”, y cosas así.
Bueno, pues después de dicho evento y como iba con chofer (es decir, me vinieron a buscar a casa) al ir a dejarme a casa aquel que más caña de dio comenzó su conducción “segura”. De entrada no se puso el cinturón “¿Para qué? si estamos aquí cerca” esta como primera “conducción responsable”. Luego entramos en el pueblo ¡A 90Km/h! cuando está limitada a 50, y que nadie se crea que se cortó. Y para terminar, giro aquí que aunque no se pueda y no se vea no pasa nada, total a esta hora “no suele venir nadie”…
En resumidas cuentas, para toda esta gente el “ir en autopista a 160 con responsabilidad” es un acto de locura y asesinato, pero el no ponerse el cinturón ni él ni sus hijos, el entrar en zonas de callejuelas a 90 y el girar donde le sale de las pelotas sin visibilidad es “una conducción responsable”.
Y claro, así luego nos encontramos con que la gente se mata en “estos actos de responsabilidad” pero luego queremos quemar en la hoguera a quién necesita viajar asiduamente y no puede tirarse media vida en autopista porque “el borrego diga a pasito la borriquita”.
Eso si, para evitar que mi amigo haga las que hizo se necesita policías vigilando lo importante, pero es más cómodo y rentable sestear en un mercedes con radar escondido detrás de una piedra en una limitación absurda y contra natura en esa recta que saben que, aunque no se ponga nada en peligro, la gente tenderá a que su sentido común le diga que vaya más deprisa que no esa señal de la pegatina, trofeo al triunfo de una DGT estalinista.
Hace dos meses pasé por una carretera comarcal (zona de la Axarquía/Málaga) que está destrozada en varios puntos desde hace más de un año por las lluvias, en lugar de arreglarla lo que han hecho ha sido poner unos conos y señales que no se ven de noche porque están sin iluminar, muy peligroso porque incluso hay carriles cortados, faltan trozos de asfalto, hay cortes, saltos, hoyos, desniveles a lo largo de varios puntos de la carretera, pues bien, en un trozo de recta, tras pasar toda esa zona tan peligrosa, saltó un flash y ayer recibí la multa por ir a 85 km/h (100 euros). No hay dinero para arreglar la carretera pero sí para poner un radar.