La Policía finlandesa ha multado con 95.000 euros por exceso de velocidad a un hombre de negocios por conducir a 77 km/h, 27 más de lo permitido, en una zona urbana de Mariehamn, en el archipiélago de Åland.
La exorbitante cuantía se debe a que la legislación finlandesa contempla un sistema de multas proporcionales a los ingresos del infractor cuando se trata de una infracción grave, de acuerdo a la última declaración de la renta disponible.
La ley considera un exceso de velocidad grave conducir a más del 15% del límite establecido, y lo castiga con un número de “días de multa” (los ingresos anuales divididos entre los días laborables del año), que aumenta cuanto más grave es la infracción.