El Defensor del Pueblo recibió el año pasado 468 quejas sobre el procedimiento sancionador de tráfico, de las que admitió a trámite 172, según se desprende de su Informe Anual. Notificaciones defectuosas, errores de los agentes al anotar la matrícula del vehículo infractor o la redacción incompleta o con errores en el boletín de denuncia son algunas de las irregularidades más frecuentes.
Además, recibió numerosas quejas en relación a las denuncias formuladas por los controladores de zonas de estacionamiento regulado, que no tienen la consideración de agentes de la autoridad y, por lo tanto, sus denuncias deben tramitarse como denuncias de carácter voluntario.
El problema se plantea cuando, en el momento de la práctica de la prueba, no existe documento gráfico que acredite la infracción y la sanción se basa, únicamente, en las manifestaciones del controlador. Por este motivo, la institución considera conveniente que los consistorios utilicen las facilidades que ofrecen los dispositivos tecnológicos para incluir imágenes en los expedientes sancionadores que presentan los controladores.