Los grafiteros de la ciudad rusa de Ekaterimburgo (Urales) han encontrado un original y efectivo procedimiento de obligar a las autoridades a arreglar las calles y carreteras. Los baches y desconchones en el asfalto son adornados con enormes caricaturas de los dirigentes provinciales y municipales, quienes a menudo incumplen sus promesas de acometer las necesarias obras.
Los retratos con los que los habitantes de la localidad rusa se encontraron en las calles son los del gobernador de la región de Svérdlovsk, Evgueni Kuiváshev, el alcalde de Ekaterimburgo, Alexánder Yákob, y el presidente de la asamblea local, Evgueni Porunov. Las partes deterioradas de la calzada surgen justo en la cavidad bucal de las imágenes de los tres responsables.
Aparecen también pintadas en el suelo las promesas hechas por ellos durantes los últimos años. «La reconstrucción de carreteras es nuestra principal tarea», es la frase pronunciada en su día por Kuiváshev mientras que en la inscripción referida a Porunov pone: «las obras para acabar con los baches estarán culminadas antes de finales de abril de 2012». Yákob, por su parte, asegura, según el rótulo trazado junto al dibujo de su rostro, que «todas las calles serán arregladas».
Por supuesto, a ninguno de los mencionados les gustó en absoluto la iniciativa de los artistas de Ekaterimburgo. Pero el efecto ha sido inmediato. Al día siguiente las caricaturas desaparecieron, pero también fueron reparados los baches. Así que en la ciudad están dispuestos a continuar utilizando el mismo método hasta que no quede un solo socavón.
El estado de las carreteras ha sido siempre uno de los males endémicos de Rusia, en donde además hay todavía muy pocos kilómetros de autopista. La corrupción contribuye a ello, ya que, para poder meterse la mayor cantidad posible de dinero en el bolsillo, los funcionarios escatiman materiales y no realizan las imprescindibles obras con la periodicidad que requiere un duro clima como el ruso. Tras el invierno, lo que era en principio una ligera fisura en el firme se convierte en una grieta o un agujero de grandes dimensiones debido a la penetración del agua y a su posterior congelamiento.
Fuente: Diario Vasco