Un conductor de 31 años ha sido detenido por agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil como presunto autor de un delito contra la seguridad vial, por circular a 227 km/h en la Autovía A-1, en un tramo cuyo límite de velocidad es 120km/h.
Los hechos ocurrieron ayer miércoles, 17 de junio, a las 11:20 de la mañana, cuando el vehículo circulaba sentido Burgos en la autovía A-I, a su paso por La Ribera, localidad de esta provincia, fue detectado por uno de los 6 radares Pegasus que van incorporados a los helicópteros de los que dispone la DGT y que hacen labores de vigilancia desde el aire.
Este tipo de servicios se realizan en numerosas ocasiones con patrullas de agentes desde tierra, con el objetivo de preservar la seguridad vial y facilitar la parada del vehículo y la notificación al presunto conductor infractor.
De esta forma, el conductor del vehículo fue parado por agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Burgos a veinte kilómetros de la capital castellanoleonesa y se le instruyó diligencias que han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción número 2 de Burgos.
El presunto autor del delito se enfrenta, según estipula el Código Penal, a la pena de prisión de tres a seis meses o a la de multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, a la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.
Fuente: DGT
Según la fotografía el vehículo circulaba a 220km/h de medición y dicha conducta debe de ser atípica, puesto que por aplicación de la OITC sobre Márgenes de Error de Cinemómetros en el caso del Pegasus es de un 10%, siendo la velocidad resultante inferior a 200 y por tanto no incardinada en el 379 C.P.
Esto mismo en Alemania, en según qué vías sería un ciudadano normal. Aquí es un delincuente….