Hace tiempo que se anunciaron en Bilbao que se instalarían las cámaras de control de acceso al Casco Viejo, parece que había quedado algo olvidado el asunto pero poco a poco ya se está llevando a cabo todo, actualmente ya están colocadas todas las cámaras proyectadas, concretamente una en cada acceso.
Las cámaras de control de acceso son en realidad lectores de matrículas destinados a identificar a los vehículos que entran o salen de la zona y sancionar en caso de que lo hagan sin permiso. De momento el sistema no sanciona ya que se está esperando a que el ayuntamiento publique la normativa que regule toda su actividad. Según se dice esto sucederá a finales de este año.
El sistema se basa en una base de datos de matriculas de vehículos en la que se introducirán las matriculas de los vecinos de la zona, repartidores o clientes de hoteles, a partir de ahí toda matricula que no esté en la base de datos será sancionada al intentar entrar en la zona.
Originalmente se pretendió que el sistema sancionatorio empezará a funcionar el año pasado, pero a raiz de la pandemia quedo todo el proyecto paralizado y se ha pospuesto para finales de este año que es cuando se sacará toda la normativa al respecto. En la normativa se va a recoger las limitaciones horarias, tiempos para entrar y salir en caso de carga o descarga, y en general las condiciones que se aplicarán para poder entrar en el caso de los clientes de hoteles.
El sistema que se pretende emplear es el de una aplicación móvil que deberán utilizar todos los implicados, desde esa aplicación móvil es desde donde se solicitará el permiso de entrada y se registrará la matrícula del vehículo implicado. Actualmente y hasta que entre en vigor la normativa, ya que las cámaras estan instaladas, según el ayuntamiento, se va a tener tiempo suficiente para probar todo el sistema.
