El modelo que se perfila con la nueva ley de la Ciencia sigue en la eterna ambigüedad con que se maneja el Gobierno, ante ello la comunidad científica española ha decidido pasar a la acción y se manifestarán este sábado, 6 de marzo, en Madrid para protestar contra la contradictoria política del Ejecutivo de Zapatero en materia de I+D+i.
La Plataforma por la Investigación, la Federación de Jóvenes Investigadores (FJI/Precarios), la Asociación para el Avance de la Ciencia y la Tecnología en España (AACTE), la Asociación Nacional de Investigadores Ramón y Cajal (ANIRC), la Asociación Nacional de Investigadores Juan de la Cierva (ANIJDC) y la Asociación de Investigadores Parga Pondal (AIPP) son el grupo de organizaciones que participarán en la protesta bajo el lema ‘Investigar es invertir en futuro’ y que cuenta con el apoyo de la Unión Sindical Obrera (USO).
Los organizadores de la manifestación explican que el Gobierno de España y su presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, afirman en sus declaraciones públicas que existe una apuesta decidida para cambiar hacia un nuevo modelo económico-productivo basado en la investigación y la sociedad del conocimiento.
Para la USO sin embargo, la realidad de sus actos es muy diferente, contradiciendo sus manifestaciones. Las acciones que está tomando el Gobierno, o más bien la ausencia de ellas, ponen en serio peligro el futuro de la investigación en España, y al mismo tiempo, comprometen el futuro del país y la salida de la crisis económica.
La lista de agravios hacia la Ciencia y la Investigación es interminable, y se reflejaron en primer lugar en los Presupuestos Generales del Estado recientemente aprobados que, han experimentado un severo recorte en las asignaciones reales a la investigación.
Estamos asistiendo a como los retrasos y la negligencia en la gestión de las convocatorias de ayudas y contratos están a la orden del día, con la inestabilidad y la precariedad que eso supone para miles de investigadores.
Contemplamos desde la USO con incredulidad cómo los cambios normativos previstos para favorecer la I+D, tales como la creación de una Agencia de Evaluación, o la reforma de las estructuras de los Organismos Públicos de Investigación, se aplazan una y otra vez. Esperemos que la nueva Ley de la Ciencia no siga este camino y su proyecto de Ley vea la luz en estos días.
En este país, el dinero de las I+D se diluye en chanchullos entre catedráticos y rectores, entre directores de I+D que juegan a las casitas con sus institutos del primo del zumo de naranja, y similares incompetentes con buenos sueldos que se lo dilapidan en sus tonterias, la de sus amigos y en dar 3 conferencias muchas de ellas dadas por el primer señor que pillan, eso si, en inglés que es muy way.
El investigador, el que de verdad curra, a ese no solo ni le llegan las migajas, sino que muchos de ellos son expulsados (o sea, acabando su contrato de obra y servicio) simplemente por quejarse que en vez de comprar un cromatógrafo de gases que cuesta 20.000 euros, prefieren gastarse eso en la convención por el sexo de los ángeles, con muchas fotos y muchos abrazos con la «comunidad científica»… la investigación en España es de tortilla de patatas…
No me extraña que entre los mejores científicos mundiales estén los españoles… que se fueron a EEUU escandalizados de estas patochadas…
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