Entre el 1 de julio y el 3l de agosto fallecieron 321 personas, 41 menos que en 2010. Se trata del mejor balance desde hace medio siglo.
Durante los meses de julio y agosto, 321 personas perdieron la vida en las carreteras españolas, 41 menos que en el verano de 2010, lo que supone un descenso del 11,3%. Igualmente, disminuyó el número de accidentes con víctimas mortales: 284, el 11,8 menos que el año anterior.
En todo caso, se trata del mejor balance de los últimos 50 veranos. En el de 1962 fallecieron 340 personas, pero en esa época circulaban por nuestras carreteras 1,5 millones de vehículos y había 3,5 millones de conductores. Hoy, tenemos un parque de 32 millones de vehículos y 26 millones de conductores.
Respecto al verano pasado, se registran descensos en la mortalidad en todos los tipos de carretera, especialmente en autopista (-57,1%). En las convencionales, también disminuye (-7,9%), aunque este tipo de vías registran tres de cada cuatro víctimas mortales (76,6%). La distracción (41,5%) sigue siendo la principal causa de los accidentes, mientras que la velocidad aparece en el 21%.
Puede descargarse la presentación «Balance de Seguridad Vial – Operación Verano 2011» en PDF
No hay duda que estas cifras son gracias a la política de radares de Pere Navarro y nada tienen que ver con el menor número de desplazamientos por la crisis, ni a la mayor seguridad de los vehículos ni por supuesto al maquillaje de las cifras a las cuales la DGT nos tiene acostumbrados.
Quizás haya que esperar a 2017 para conseguir las verdaderas estadísticas del 2011 y comprobar si, efectivamente, estamos de enhorabuena o no.