La Unión Sindical Obrera considera que el IPC correspondiente al mes de marzo, supone estabilidad en los precios y una caída de la actividad económica que confirma la recesión de nuestra economía.
Un IPC que se sitúa en el 1,9% es un valor de referencia demasiado alto para las economías domésticas, que en términos de variación mensual han sufrido en este mes un incremento del 0,7%. Si a ello añadimos que los salarios, tal y como recoge el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva crecerán un 0,5%, la consecuencia es que se está consolidando una pérdida de poder adquisitivo de 1,4 puntos y que para los empleados públicos supone un 6,9% si tenemos en cuenta la reducción salarial y la posterior congelación de sus retribuciones.
Esta pérdida de poder adquisitivo, unida los incrementos muy superiores al crecimiento del IPC como es el incremento del precio de la luz (7%) o del gas, la gasolina, o la recientemente anunciada en Madrid con un 30% en el transporte público harán que disminuya la renta disponible en los hogares.
Esta disminución de renta implica una caída de la demanda interna, y por tanto una contribución negativa al crecimiento del PIB ahondando más en la recesión y en la destrucción de empleo.
La USO considera necesario que se incremente la liquidez en los hogares como un elemento de reactivación económica, por ello espera que el Gobierno tome medidas que favorezcan a los ciudadanos. ¿Por qué no una amnistía del déficit tarifario para los ciudadanos? ¿Por qué no una quita, tal y como recomienda el Fondo Monetario Internacional de la deuda hipotecaría de las familias?.
– Repunte del crecimiento mensual de los precios.
– Pérdida del poder de compra y de renta disponible en los hogares.
Bien sigamos subiendo los impuestos y veremos en donde acaba la actividad económica el año que viene…
No hace falta esperar al año que viene, la actividad economica ya se la van a cargar directamente este año.