La directora general de Tráfico, María Seguí, ha reconocido que existe una ligera reducción en el número de multas como consecuencia de la falta de mantenimiento de los 750 radares existentes en las carreteras, “muchos de los cuales han dejado de funcionar este último año”.
Así lo ha asegurado Seguí en su comparecencia en la comisión de Interior del Congreso donde ha detallado los presupuestos generales del Estado para su departamento en 2012 que prevé recaudar 856,61 millones de euros en concepto de tasas y multas de tráfico.
El presupuesto global de la DGT asciende a 859 millones de euros, lo que representa una reducción del 2,73% sobre el gasto real de 2011. Hay que recordar que Automovilistas Europeos Asociados (AEA) advirtió hace unos meses que había habido una disminución de las denuncias de exceso de velocidad motivada por tres causas: porque hay menos movimiento de vehículos; porque han habido numerosas obras en la red de autovías que han impedido que se pueda circular a más de 120 km/h; y porque no están operativos todos los radares.
Según los cálculos de AEA, ha podido haber momentos, coincidiendo con la aplicación de la limitación de velocidad a 110 km/h, en que han estado funcionando la mitad de los radares. Además AEA mantiene que “el importe de las sanciones por exceso de velocidad de la DGT son ilegales ya que no se aplican correctamente los márgenes de error de los radares”.