El secretario de Estado de Igualdad y Seguridad Social José Manuel Moreno ha confirmado que los llamados medicamentos comunes, como el parecetamol, serán costeados por los pacientes, porque asegura nuestros sistema de salud «no puede hacerse cargo».
Moreno ha explicado en Los Desayunos que en los dos últimos años el gasto sanitario había aumentado un 173% y que actualmente el déficit del sistema sobrepasa los 16.000 millones de euros. Por eso, ha justificado el número dos de Sanidad, o se implentan reformas o el sistema «va a la quiebra».
El próximo 1 de julio entra en vigor parte de la ley de sostenibilidad del gasto sanitario, concretamente la que afecta al copago o repago de los medicamentos, por el que se cobrará una parte del valor a los pensionistas, se subirá el porcentaje que pagan los trabajadores y quedarán exentas de pago las personas desempleadas.
Asegura el secretario de Estado que se ha hecho un gran esfuerzo para cruzar datos con Haciendaen tan poco tiempo y que los facultativos tendrán una referencia del porcentaje que tiene que costear cada uno de sus pacientes. Asegura Moreno que esta actualización ha supuesto un coste de medio millón de euros, aunque ha señalado que también ha revelado bolsas de fraude como las de 200.000 trabajadores que son beneficiarios de tarjetas de pensionistas.
Sistema de «obligado cumplimiento»
El número dos de Sanidad ha recordado que lo regulado mediante un decreto reciente es de «obligado cumplimiento» y ha manifestado su sorpresa porque las únicas comunidades que han avanzado que tendrán problemas para estar operativos en esa fecha son los sistemas de salud de las comunidades en las que no gobierna el Partido Popular.
El dirigente popular ha incidido en que el caso de los pensionistas, el 83% pagará un máximo de 8 euros. Ha aclarado que cuando se llegue a ese tope, se seguirá cobrando el porcentaje estipulado, y que el exceso le será devueltvo en un plazo de tres o cuatro meses. Moreno ha defendido este sistema, porque en su opinión un o de los fines de la medida es ser disuasorio.
Por otro lado, también ha defendido que es una medida implementada en función de la situación de renta, lo que al sectretario de Estado le parece lo más oportuno, además de que en su opinión se preserva lo esencial «ir al médico o hacerse una radiografía seguirá siendo gratuito».
Por otra parte, ha destacado que no hay que tener miedo a la colaboración público-privada. «La titularidad es pública y siempre será un servicio público», ha explicado, recordando que esta colaboración podrá resultar «más eficiente» para usuario y «más barato» para la Administración pública
Sanidad e inmigrantes
Por otro lado, el secretario de Estado ha afirmado que en España «ningún ciudadano va a morir por falta de atención médica» y ha explicado que «las personas en situación irregular no tienen derecho a la tarjeta sanitaria como sucede en el entorno europeo y en la práctica totalidad del mundo».
En este sentido, ha señalado que «antes los ciudadanos en situación irregular tenían esa tarjeta y podía programar una operación y eso no se puede hacer». Sin embargo, ha subrayado que «se seguirá incluyendo la asistencia sanitaria a personas en situación irregular a menores de 16 años, parto y postparto, así como situaciones de urgencia». «En el caso de un ciudadano que tiene cáncer, tendrá asistencia hasta el alta», ha asegurado.
Finalmente, Moreno ha explicado que han «bloqueado el denominado turismo sanitario para evitar que personas con alto nivel de renta de otros países utilicen y abusen del servicios nacionales españoles de salud».
Fuente: RTVE