La concentración de alcohol en el aliento es mayor si se ha mezclado alcohol con un refresco bajo en calorías, según un estudio realizado por la Northern Kentucky University y el centro de ciencias de la salud de la University of North Texas.
Para elaborar el estudio los investigadores contaron con 16 participantes, a quienes suministraron de forma aleatoria la misma cantidad de alcohol combinado con una bebida azucarada, con un refresco sin calorías o un placebo.
Según Cecile Marczinsk, profesora de la Universidad de Kentucky, “el alcohol consumido con una bebida de dieta produjo una mayor concentración de alcohol en el aliento” y una mayor alteración en el comportamiento del individuo.
La explicación es que el azúcar tiene la misma función que la comida y retrasa la absorción del alcohol en la sangre, mientras que las bebidas con edulcorantes artificiales permiten que el alcohol se absorba sin obstáculos.