Más de 2.000 vehículos dedicados al transporte escolar y de menores han sido controlados durante la campaña especial de vigilancia que la Dirección General de Tráfico ha realizado entre el 16 y el 20 de enero para comprobar que los vehículos dedicados a este tipo de transporte cumplen la normativa establecida.
Durante estos cinco días de campaña, se ha constatado que de los 2.081 vehículos controlados que se dedican dedicados a este tipo de transporte 776 han sido denunciados sobre todo por irregularidades administrativas.
.- “Cada día, 230.000 alumnos utiliza el autobús escolar para ir al colegio y volver a casa. Es un medio de transporte seguro, tal y como muestran las cifras de siniestralidad vial, ya que el año pasado no se produjo ninguna víctima mortal entre los usuarios de este tipo de vehículos, pero que debido a la vulnerabilidad de sus pasajeros y a las vías por las que se suele circular, en su mayoría carreteras convencionales, necesita de una especial vigilancia para mantener estos niveles de seguridad”. Ha declarado el director general de Tráfico, Gregorio Serrano.
Hay que destacar en esta campaña que ningún conductor dio positivo ni en la prueba de alcoholemia ni en la de drogas.
Aunque si existen casos recientes como:
En el mes de noviembre pasado, fueron identificados dos conductores que dieron positivo en los controles de alcohol y drogas. Uno de ellos fue una conductora de un autobús escolar que transportaba niños de un centro escolar ubicado en Villaviciosa de Odón (Madrid) y que tras realizar las pruebas de detección de alcohol y drogas, dio positivo con 0,28 y 0,27 mg de alcohol por litro de aire espirado, casi el doble de lo permitido, estando limitada la tasa de alcohol para los conductores profesionales en 0,15 mg/litro.
Asimismo, en Trujillo (Cáceres) otro conductor fue detenido como presunto autor de un delito contra la seguridad vial por conducir el autobús escolar quintuplicando la tasa de alcoholemia (0,84 mg/l). Los agentes procedieron a inmovilizar el vehículo hasta que otro conductor de la empresa se personó en el lugar haciéndose cargo del vehículo y de la continuación de la ruta escolar.
LAS MÁS NUMEROSAS
Las irregularidades administrativas son las que mayor número de denuncias han generado. Por ejemplo, no disponer de la autorización especial para realizar transporte escolar ha supuesto la denuncia a 581 vehículos por no tener suscrito un seguro de responsabilidad ilimitado, como exige la ley, ha dado lugar a 167 denuncias.
Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil también han comprobado que 64 vehículos de transporte escolar presentaban deficiencias en las puertas de servicio y emergencias, así como en sus dispositivos de accionamiento.
Por último, en lo que se refiere al exceso de tiempo de conducción o minoración del descanso, 2 conductores fueron denunciados por este motivo y otros 26 por no llevar a bordo del autocar una persona encargada del cuidado de los menores, cuando así procedía.
Respecto al cinturón de seguridad en aquellos vehículos que los llevan incorporados, en las inspecciones realizadas por los agentes, se constató que en 8 casos, denunciados no se hacía uso de los mismos.
La preocupación de la DGT para que el transporte de menores se realice de forma segura lleva a los agentes a realizar permanentemente controles en este tipo de vehículos.
SOBRE LA ACCIDENTALIDAD
En 2015, los autobuses escolares se vieron implicados en 27 accidentes (14 en vías interurbanas y 13 en urbanas), en los que no falleció ninguna persona aunque 9 ocupantes resultaron heridos.
Según un estudio elaborado por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil sobre accidentalidad y lesividad de los vehículos dedicados al transporte escolar:
· La gran mayoría de ellos ocurren en vías convencionales, el 65% ocurrieron en esta clase de vías.
· El tipo de accidente más frecuente es la colisión fronto-lateral.
· La distracción y la velocidad inadecuada aparecen como factores concurrentes más frecuentes.
Fuente: DGT