La fuerza que soporta el ocupante de un vehículo en caso de choque, la distancia de parada de un vehículo, la distancia que recorre un cuerpo por la inercia y que puede hacer que se golpee con el parabrisas… son cuestiones «de seguridad» que dependen de leyes físicas.
¿Por qué hay que frenar antes de entrar en una curva? ¿Por qué dicen las autoridades que la velocidad incrementa las posibilidades de lesión en caso de accidente o la distancia necesaria para detener un vehículo? Las leyes físicas –como la Tercera Ley de Newton– y su formulación matemática lo explican. Y no es algo lejano y abstruso, sino que nos afecta muy de cerca a los conductores.