En su décimo año de funcionamiento, el servicio de asistencia de grúas ligeras para la retirada urgente de vehículos de la A-8 y accesos, en el entorno metropolitano de Bilbao, ha intervenido en 384 incidentes (121 accidentes y 263 averías). En 150 de los 384 casos, las personas conductoras no tuvieron posibilidad de apartar su vehículo al arcén.
Un incidente de este tipo ocasiona una retención de unos 6,5 kilómetros de media en condiciones de circulación normales. No obstante, 2020 ha estado marcado por las restricciones de circulación derivadas de la pandemia, lo que ha provocado un descenso de en torno al 40 %, como media, en los flujos de circulación en los accesos a la capital vizcaína. Un factor que también se ha tenido en cuenta a la hora de calcular los km de retenciones totales que han podido evitarse. Se estima, por tanto, que el servicio impulsado por el Gobierno Vasco ha evitado unos 585 kilómetros de retenciones (150 incidentes por 3,9 Km.).
En palabras de la Directora de Tráfico, Sonia Díaz de Corcuera, “Siguiendo las líneas del nuevo Plan Estratégico 2021-2025, el Gobierno Vasco apuesta por una seguridad vial y una movilidad segura y sostenible, con políticas de prevención de accidentes, con una Visión Cero víctimas y con la mirada puesta, además, en la fluidez de la circulación en la red viaria vasca. En ese sentido, el servicio de grúas de rescate se ha consolidado como una herramienta muy eficaz, que nos acerca al modelo de movilidad fluida y segura por el que trabajamos.”
Desde la puesta en marcha del servicio hace ya una década, las grúas han tenido 5.233 actuaciones. En 2020 el 31’5 % de las veces se han movido por accidentes, un porcentaje que en 2019 fue del 40’4 % y de casi un 42 % en 2018. Se observa, por tanto, una tendencia descendente en los rescates originados por accidentes durante los últimos años, frente al aumento gradual de los rescates por averías.
Las grúas, hasta un máximo de cuatro, se posicionan en la A-8, entre el punto kilométrico 110 (Basauri) y el 139 (límite territorial con Cantabria), para la realización de las tareas de rescate de los turismos accidentados en el citado tramo de la A-8, así como en los accesos comprendidos en el mismo, en ambos sentidos de circulación. Las ubicaciones de las grúas se determinan previamente; se trata de puntos estratégicos que abarcan amplios tramos de vía en ambos sentidos. El tiempo medio que transcurre desde que una grúa de rescate recibe el aviso de movilización desde el Centro de Gestión de Tráfico de Euskadi CGTE-ETKZ hasta la llegada al punto exacto en que se requiere la prestación de su servicio, es de unos 12 minutos.
El horario habitual del servicio es de 7:30 a 9:30 horas por las mañanas y de 17:30 a 19:30 horas por las tardes, de lunes a viernes, si bien, este horario es flexible y puede variar estacionalmente en función de los datos estadísticos de accidentalidad. Los vehículos siniestrados se retiran a un lugar seguro, que determina la patrulla de la Ertzaintza que atiende la incidencia. Si esto no fuera posible, se llevan a las instalaciones de la empresa adjudicataria del servicio donde, posteriormente, acude la grúa de asistencia particular del vehículo.
Fuente: Ertzaintza
