Que en los periodos de campaña electoral las administraciones abren la mano y ponen menos multas es algo que siempre se ha sospechado. Nada más impopular que vaciar el bolsillo del votante poco antes de que acuda a depositar su papeleta en la urna. Ahora, tenemos la evidencia de que eso es así.
Según datos del Departamento Jurídico de Dvuelta, entidad dedicada a la defensa de los conductores, sólo durante el mes de mayo de 2016 (ya en plena vorágine electoral) las notificaciones publicadas por las distintas administraciones españolas en los boletines oficiales (que representan alrededor del 40% del total de las notificaciones por multas) cayeron casi un 56% (55,97) con respecto al mismo mes de 2015.
Pero es que, en 2015, cuando se celebraron elecciones municipales y autonómicas, el volumen de notificaciones había caído en ese mismo mes un 33% con respecto a 2014. En 2014, año sin elecciones de ningún tipo, las notificaciones (multas) habían subido un 11,5%, en el mismo mes sobre mayo de 2013.
Seguridad vial Vs. oportunismo político
Estos descensos en el número de notificaciones edictales emitidas sólo puede responder a la voluntad de los distintos gobiernos y administraciones de “relajar” la presión sancionadora de los conductores. No se entiende de otro modo, cuando el resto de los factores que indicen en la circulación (evolución creciente de venta de combustibles, aumento de desplazamientos y de intensidad de tráfico en las ciudades) muestran una tendencia de la que se debería inferir un incremento en la recaudación por multas.
Estos datos demuestran el carácter eminentemente recaudatorio de las multas de circulación; porque lo que no se entendería es que esa relajación sancionadora se realizara sacrificando la seguridad vial a la que, se supone, está sometido el régimen sancionador en materia de tráfico. En tal caso, simplemente, se estarían cambiando vidas por votos.
Por ello, Dvuelta pide a los partidos políticos que realicen una profunda reflexión sobre cómo reformar el actual sistema, concebido y desarrollado con el único objetivo de llenar las arcas de la administración.
Fuente: DVuelta