Objetivo: carreteras convencionales seguras

Del total de víctimas mortales en carretera en 2016, el 75%, 964 personas, perdieron la vida en una convencional. Desde 2000 a 2016 se ha reducido la mortalidad en estas carreteras un 73%. Y aunque ya hemos alcanzado uno de los objetivos asumidos por el Gobierno en materia de seguridad vial –reducir a la mitad el número de fallecidos y lesionados en 2020 (compromiso alcanzado en el marco de la ONU)–, estamos aún lejos de lograr el de cero víctimas en 2050.

Sistemas Seguros

¿Existe alguna fórmula para lograr esos objetivos? Parece que sí. Organismos como el Foro Internacional del Transporte (ITF) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) o el European Transport Safety Council (ETSC) consideran que la solución pasa por aplicar la visión de un Sistema Seguro. Este concepto, en la línea de Visión Cero que lleva aplicándose más de tres décadas en Holanda y Suecia, no acepta ni muerte ni lesiones graves en carretera y postula que las personas cometemos errores que pueden causar accidentes de tráfico. Pedro Tomás Martínez, jefe del Área de Movilidad de la DGT, aclara que “la aproximación del Sistema Seguro implica un salto cualitativo en cuanto a los medios que se despliegan para evitar y compensar el error humano cuando este se produce”. Lo primero que hay que considerar son los límites biomecánicos del ser humano. “La tesis de partida –añade Pedro Tomás– es la adopción de velocidades seguras a las cuales los accidentes no son fatales en función de la tolerancia biomecánica para la mayoría de las personas”.

Es decir, si existe convivencia entre usuarios vulnerables (peatones o ciclistas) y vehículos, la velocidad segura debe ser 30 km/h; si hay riesgo de colisión lateral por estar en una intersección, 50 km/h; y si hay riesgo de choque frontal, a 70 km/h. Si no hay presencia de usuarios vulnerables o riesgo de colisiones frontales o frontolaterales, a 100 km/h o más.

Con el tiempo, el diseño de carreteras y vehículos y las nuevas tecnologías que promueven y apoyan una conducción segura desempeñarán un papel aún mayor en la creación de un Sistema Seguro. Mientras tanto, “desde la ingeniería se debe ahondar en adaptar el sistema viario al usuario para influenciar su comportamiento en lugar de adaptar al usuario a un sistema inseguro”, concluye Pedro Tomás.

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Autor: Alvaro
Creador y administrador del grupo de webs de Portalvasco.com. Desde Septiembre del año 2006 escribiendo en este blog sobre aviso de radares, radares y cinemómetros, noticias sobre temas de tráfico, motor, seguridad en carretera, seguros, leyes, un poco sobre sociedad, actualidad y temas relacionados con informática, accesorios electrónicos e internet.

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