No todas las calles del carco urbano admiten la limitación en 30km/h, esto es lo que ha dicho Mario Arnaldo, presidente de Automovilistas Europeos Asociados en una entrevista que se le ha realizado. En esta entrevista podemos ver el planteamiento de AEA al respecto en donde dice que no todo es cuestión de reducir limites de velocidad.
Mientras en Japón gracias a una concienciación y educación de lujo ciudadana las personas se comportan con sentido común y aceptando reglas lógicas, aquí es la prohibición y la vara lo que sirve para que nadie se desmande.
Sin embargo es muy fácil sobrepasar la línea de la tiranía si todo se hace a base de prohibir y si sobre todo estas prohibiciones se hacen desde el punto de vista de control y recaudación. Efectivamente hay calles en ciudad que no 30, sino 20 debería ser el límite mientras que otras que, aun llamadas urbanas no lo son, se podría ir a 70. Sin embargo meto el «troyano» de los 30 para así, dejar a las guardias municipales poner los radares en esas vias donde ir a 30, es simplemente un disparate.