Para contribuir a una reducción deseable del consumo total de energía en el sector del transporte, el primer paso es la mayor utilización de los modos de transporte más eficientes (tren y autobús para viajes interurbanos y marcha a pie, bicicleta y transporte público en medio urbano).
Ahora bien, es muy importante saber que, aún utilizando el coche para desplazarnos, podemos conseguir grandes ahorros de energía y de emisiones contaminantes.
La conducción eficiente consiste en una serie de técnicas de conducción, que unidas a un cambio en la actitud del conductor, dan lugar a un nuevo estilo de conducción acorde a las nuevas tecnologías y sistemas que incorporan los vehículos modernos.
Con la conducción eficiente, además de una mejora del confort, un aumento de la seguridad vial y una disminución del tiempo de viaje, conseguiremos una reducción del consumo de carburante y de emisiones al medio ambiente asociadas, así como una reducción del coste de mantenimiento.
LAS 10 CLAVES DE LA CONDUCCIÓN EFICIENTE
Fuente: Guía Practica de la Energía. Consumo eficiente y responsable.
Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía.
Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.
1.Arranque y puesta en marcha:
– Arrancar el motor sin pisar el acelerador.
– Iniciar la marcha inmediatamente después del arranque.
En motores turboalimentados, esperar dos o tres segundos antes de iniciar la marcha.
2.Primera marcha:
– Usarla sólo para el inicio de la marcha.
– Cambiar a 2ª a los 2 segundos o 6 metros, aproximadamente.
3.Aceleración y cambios de marchas:
– Según las revoluciones:
a. En los motores de gasolina, antes de las 2.000 r/min
b. En motores diesel, antes de las 1.500 r/min
– Según la velocidad:
a. A 2ª marcha: a los 2 segundos o 6 metros, aproximadamente
b. A 3ª marcha: a partir de unos 30 km/h
c. A 4ª marcha: a partir de unos 40 km/h
d. A 5ª marcha: por encima de unos 50 km/h
– Acelerar de forma ágil tras la realización del cambio
4.Utilización de las marchas:
Circular lo más posible en las marchas más largas y a bajas revoluciones
– Es preferible circular en marchas largas con el acelerador pisado en mayor medida* que en marchas cortas con el acelerador menos pisado
(*) el uso más eficiente del pedal acelerador tiene lugar entre el 50 y el 70% de su recorrido.
– En ciudad, siempre que sea posible, utilizar la 4ª y la 5ª marcha, respetando siempre los límites de velocidad.
5.Velocidad de circulación:
– Mantenerla lo más uniforme posible; buscar fluidez en la circulación, evitando los frenazos, aceleraciones y cambios de marchas innecesarios.
6.Deceleración:
– Levantar el pie del acelerador y dejar rodar el vehículo con la marcha engranada en ese instante.
– Frenar de forma suave con el pedal del freno.
– Reducir de marcha lo más tarde posible, con especial atención en las bajadas
Circulando por encima de unos 20km/h con una marcha metida y sin pisar el acelerador, ¡el consumo de carburante es nulo! En cambio…¡ a ralentí, el motor del coche consume entre 0,5 y 0,7 litros/hora!
7.Detención:
– Siempre que la velocidad y el espacio lo permitan, detener el coche sin reducir previamente de marcha.
8.Paradas:
– En paradas prolongadas (por encima de 60 segundos), es recomendable apagar el motor.
9.Anticipación y previsión:
– Conducir siempre con una adecuada distancia de seguridad y un amplio campo de visión que permita ver 2 ó 3 vehículos por delante.
– En el momento en que se detecte un obstáculo o una reducción de la velocidad de circulación en la vía, levantar el pie del acelerador para anticipar las siguientes maniobras.
10. Seguridad:
– En la mayoría de las situaciones, aplicar las reglas de la conducción eficiente contribuye al aumento de la seguridad vial.
– Pero obviamente existen circunstancias que requieren acciones específicas distintas, para que la seguridad no se vea afectada.