La DGT va a estudiar adecuadamente la propuesta presentada por la plataforma ciudadana Ponle Freno, de la que
forma parte Automovilistas Europeos Asociados (AEA), de poner radares solo en puntos negros y carreteras secundarias.
Según la directora general de Tráfico, María Seguí, se trata de una “opción muy razonable que parte de un trabajo
previo”, aunque hay que tener en cuenta las limitaciones presupuestarias que sufre la DGT, ya que “no son tiempos demasiado abundantes y, por lo tanto, habrá que ver cuántos nuevos radares podremos poner”.
Según un informe realizado por AEA en el año 2008, sólo el 26,9 por ciento de los puntos de control de la velocidad
instalados cumplían con el requisito de estar en un punto negro. El resto se habían colocado en lugares con mínima o
nula siniestralidad.