El Consejo de Ministros tiene previsto enviar hoy al Congreso la reforma de la Ley de Tráfico, que, entre otras novedades, aumenta los límites de velocidad a 130 en algunos tramos de autovías y autopistas, lo que provocará la reducción y anulación de miles de multas por exceso de velocidad.
En el momento en que se apruebe tal reforma en esos términos, Dvuelta, entidad dedicada a la defensa de los conductores, presentará un Recurso General ante la DGT en el que instará a la Administración a que revise de oficio todos aquellos expedientes sancionadores por exceso de velocidad en los que se hayan denunciado infracciones por sobrepasar el límite de 120 km/h en aquellos tramos en los que se haya producido el aumento del límite a 130 km/h.
Este Recurso General tiene su fundamento en la Constitución Española (Art. 9, en relación con el Art. 25), que atribuye, con carácter retroactivo, efectos favorables para el infractor de aquellas normas que le pudieran beneficiar.
Según las estimaciones de Dvuelta, esta circunstancia podría afectar a prácticamente la totalidad de las multas de tráfico impuestas por sobrepasar el límite de 120 km/h en autovía y autopista, si bien habrá que esperar a ver qué tramos concretos de la red de carreteras se ven afectados por esta modificación.
La revisión de los expedientes no solamente determinará la anulación o reducción en su caso de la parte económica de la multa, sino que en otros muchos casos determinará que se anule la pérdida de puntos.
Según Elena Grande, directora jurídica de Dvuelta, ahora resulta fundamental recurrir cualquier sanción por exceso velocidad, porque tan solo podrá ser posible aplicar retroactivamente la Ley a aquellos expedientes que no sean firmes, o en los que no se haya pagado la multa.
Alcohol cero
Igualmente, Dvuelta pide que en la tramitación parlamentaria de la Reforma de la Ley de Seguridad Vial se aproveche para implantar el límite cero para alcoholemia, como ya lo es para los controles de drogas. Y que, en todo caso, se vuelva al sistema anterior a la implantación al carné por puntos, cuando la infracción por alcoholemia llevaba automáticamente aparejada la pérdida temporal del carné de conducir.
Resulta contradictorio, en opinión de Dvuelta, que, por un lado, la DGT haga suya la bandera de la lucha contra el alcohol al volante pero se encuentre más cómoda con un sistema (el carné por puntos) que permite encadenar varias infracciones por alcoholemia antes de que se produzca la pérdida del carné.