El Pilar Europeo y otros debates sociales de la Unión Europea han protagonizado el Comité Directivo Extraordinario Ampliado de la CES. USO ha participado en esta reunión de la Confederación Europea de Sindicatos, en la que se han abordado los principales debates que están teniendo lugar en el seno de la UE y que afectarán de manera decisiva al futuro de los europeos.
Plan de Acción sobre el Pilar Europeo de Derechos Sociales
La CES ha publicado este Plan de Acción para implementar el Pilar Europeo de Derechos Sociales. Un plan para el cual los sindicatos europeos, USO entre ellos, llevan presionando desde hace cuatro años, cuando fue adoptado. Como indica el secretario general de la CES, Luca Visentini: «ha llegado el momento de una Europa socialmente más justa. Este plan de acción podría hacerla realidad».
El sindicalismo europeo celebra que la Comisión Europea reconozca los errores cometidos en la anterior crisis. Y que ahora incluya objetivos ambiciosos sobre empleo, habilidades y género, e iniciativas legislativas fundamentales. Si los estados miembros las implementaran, las propuestas elevarían constantemente los estándares económicos y sociales en toda Europa. Otro aspecto positivo es la apuesta de situar la agenda por el trabajo decente en el centro del modelo de desarrollo europeo.
Sin embargo, son necesarias medidas más contundentes para prevenir todas las formas de trabajo precario, así como alcanzar normas comunes de seguridad social, y comprometerse a seguir con el apoyo de emergencia para el empleo y los salarios hasta que haya comenzado la recuperación real. Igualmente decepcionante es la ausencia de una iniciativa legislativa sólida sobre la renta mínima y una propuesta sobre un plan de reaseguro permanente para apoyar el empleo. Tampoco existe ninguna iniciativa sobre información, consulta y participación de los trabajadores, o en los comités de empresa europeos.
Hoy, el 88% de los europeos dice que la «Europa social» es importante para ellos. Por ello, la implementación del Pilar debe estar a la altura de sus expectativas. La próxima Cumbre Social de Oporto, organizada por la Presidencia portuguesa del Consejo de la UE para mayo de este año, servirá para comprobar hasta qué punto la UE se halla comprometida con la aplicación de la agenda social.
Conferencia sobre el Futuro de Europa
En 2019, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció una Conferencia respaldada por el Parlamento destinada a reflexionar en profundidad sobre el rumbo de la UE y su estructura institucional. En un contexto de Brexit, amenazas al Estado de Derecho en numerosos estados miembros y con la llegada de una pandemia que ha expuesto la fragilidad de los sistemas sociales en Europa, la UE necesita afrontar los desafíos, reevaluarse y llevar a cabo un cambio de dirección que la comprometa con sus principios fundadores. De otro modo, podría verse abocada a una crisis sin precedentes.
La CES lleva desde entonces presionando a las instituciones para que la Conferencia incluya una dimensión social fuerte. Que cuente con la participación de los sindicatos y adopte la propuesta de incluir obligatoriamente un Protocolo de Progreso Social en los tratados de la UE. La CES lleva impulsando esto último desde hace años. Y, en el último Congreso, se reiteró la necesidad de un Protocolo de Progreso Social en los tratados para garantizar que los derechos sociales, sindicales y de los trabajadores tengan prioridad sobre las libertades económicas en caso de conflicto. Por ello, en el caso de que en la Conferencia se discuta la posibilidad de modificar los tratados, es esencial que se incluya esta propuesta.
El sindicalismo europeo, contando con la participación de USO, está centrando sus esfuerzos para que las buenas intenciones iniciales de la Comisión Europea ante esta crisis se hagan realidad. Que se traduzcan en políticas; impidiendo que la Conferencia sobre el Futuro de Europa se reduzca a un mero trámite burocrático. En un momento en el que las democracias están siendo atacadas, es imprescindible reforzar las instituciones y mejorar los mecanismos de toma de decisiones, apostando por proteger y crear empleos de calidad.