El artículo de hoy simplemente es un divertimento de especulación mental en el cual después de ver como esos “expertos” económicos un día dicen una cosa y al día siguiente hacen justo la contraria pues como que ya no me fío de nada, y mucho menos en sus palabras y sus “Imposibles”.
Y digo imposibles porque aquellos mismos que hoy culpabilizan al súbdito borbónico de la burbuja inmobiliaria por haber comprado esos pisos a ese precio tan disparatado sin pararse a decir que mucho de lo que se construía no se vendía ya que era sostenido por capital de los bancos, es decir, de todos nosotros son los mismos que hace 10 años nos alentaban a invertir en ladrillo porque “los precios podrán nivelarse PERO NUNCA BAJARAN DE PRECIO”, y esos mismos son los que sacando pecho se ríen de nuestra estupidez al haber comprado un ático de 50m2 en el centro de Madrid por 50 millones de pesetas en una hipoteca a 50 años, eso si, bien que se callan que fueron ellos mismos los que nos aconsejaron hacerlo porque “ya estaban amenazando con la hipoteca Japonesa”.
Para aquellos que de memoria anden cortos o simplemente aquellos que por motivos políticos o de otra índole no quieran acordarse recordaré que una hipoteca a la japonesa no era ni más ni menos que una hipoteca diseñada para que cualquiera pudiera pagar una vivienda a precios más allá de lo que podía ganar en una vida, es decir, que el padre en vez de dejarle al hijo unos bienes lo que le dejaba era una deuda y si este hijo no quería hacerse cargo de esa hipoteca el banco se quedaba con la vivienda, aunque el padre hubiera estado pagando toda su vida porque como quiero recordarle a esos expertos LA VIVIENDA ES IMPOSIBLE QUE BAJE DE PRECIO, A LO SUMO SEGUIRA SUBIENDO.
¿Por qué los poceros de turno construían sin preocuparse de si tenían o no que vender? Porque el banco ya estaba dispuesto a «pagar» por ese ladrillo aunque no tuviera clientes en esa locura especulativa del ladrillo.
Pues bien, después de que la misma mano que ha sostenido este disparate de burbuja que repito y quiero que quede bien claro FUERON LOS BANCOS (al constructor se le daban los créditos no por las viviendas que había vendido, sino por las que había construido aunque tuviera 100.000 viviendas vacías sin vender), dejando que los constructores tuvieran una “máquina de hacer dinero” ya que un piso era “un lingote de oro” cuyo precio NUNCA BAJARIA.
Por eso ahora los bancos la pasan canutas, porque tienen miles de pisos de esos que NUNCA SE VENDERAN porque ¿alguien podía tan siquiera pensar en comprase un piso en una ciudad fantasma como la del pocero a 500.000 euros el piso? Claro que no, y ahora ¿Quién es el dueño de esa ciudad fantasma? Pues el banco, que le dio al pocero créditos por valor de ese disparate, sin haber vendido ni una farola. Y ahí reside el truco.
Pero todo esto ya lo sabemos todos, sin embargo esos “mercados” son corredores de fondo, lo que hacen hoy es plantar la semilla que esperan recoger dentro de años o incluso décadas. El tema de la deuda no fue ni más ni menos que lo que hace un camello en la puerta del un colegio, regala la droga a los niños hasta que se enganchan y luego les obliga a pagarlas al precio que a él le de la gana al igual que “los mercados” que hagan lo que hagan los rajoys de turno ellos marcarán las primas de riesgo para que cada vez España, en una ESTUPIDA DEUDA SOBERANA CONTRAIDA tenga que pagar más y más intereses.
Pues bien, como ya no me fío ni de nada ni de nadie y aplicando lo que en los últimos 20 años he aprendido voy a soltar una teoría… a ver si me podéis seguir… en 2008 se cae todo esto, los bancos “lloriquean” que no tiene dinero y que todo se va la mierda, los estados dirigidos por marionetas de pacotilla como Zapatero o Sarcozy salen rápido a darles dinero público que todos sabemos nunca recuperaremos, mientras sus directores de banco se jubilan con decenas de millones de euros, sueldos vitalicios, prebendas… el último ya lo conocemos, Rato… que se ha “dimitido” con “tan solo 1,6 millones de euros”, y todo sale de nuestros bolsillos.
«El Milagro Ansar» se puede resumir en la portada de esta revista. ¿Y quién financió toda esta locura? el súbdito borbónico.
Ahora desde Bruselas se han dado cuenta que los bancos ese ladrillo lo ponían “a su precio” y que al ponerlo al verdadero precio de mercado en realidad sus inversiones inmobiliarias son UNA MIERDA donde vuelven a lloriquear para conseguir más dinero público.
Ahora lanzo mi hipótesis:
La gente no puede pagar la hipoteca y pierde la casa, contrayendo además una deuda de por vida con el banco que todos sabemos NUNCA PODRAN PAGAR.
Los bancos bajan los precios de la vivienda haciendo competencia desleal (ya que no conceden hipotecas nada más que a aquellos que compran uno de sus pisos) obligando a los dueños que quieren deshacerse de su vivienda a venderla a precio tirado.
Los expertos, esos mismos que antes decían que invirtieras en ladrillo ahora te animan a que regales tu casa porque es un “activo tóxico” aunque pierdas dinero convenciéndote de que “poco más que van a regalar los pisos porque hay mucho stock”.
Y ahora esperamos unos años, y nos damos cuenta que los particulares, es decir, la gente normalita pocos pisos tienen para vender, que todo el mercado inmobiliario se lo ha quedado la banca y que no existen constructores ya que no fluye el crédito, además de haberse llevado calentito y por la cara cientos de miles de millones de euros…
… ¿Y si entonces cogen y vuelve ha hacer que el precio de la vivienda vuelva a subir rápida y escalonadamente concediendo nuevamente créditos con el dinero que nos han robado? ¿Qué pasaría? ¿Imposible? ¿Tan imposible como te decían antes que bajase la vivienda de precio?
Como ya he dicho, yo no me fío ya ni de mi padre, como para fiarse “de los expertos”.
No dudes que será así. Son los ciclos.
Yo los ciclos los entendía de otra forma, pero bueno, si, digamos que así son los ciclos a la española.