El presidente de Automovilistas Europeos Asociados (AEA), Mario Arnaldo, ha advertido que el responsable de la seguridad vial en España “tendría que dimitir” si a finales de año «no se baja la barrera de 2.700 muertos» en carretera. Arnaldo ha manifestado esto a raíz de la previsión del Ejecutivo de no superar los 3.000 muertos en accidentes de tráfico este año, según las declaraciones efectuadas por el Ministro del Interior, señor Rubalcaba.
A juicio del presidente de A E A, “a esa cifra ya tenía que haberse llegado el año anterior, y no se cumplió el objetivo”. “Si no registramos este año una cifra inferior a los 2.700 muertos, sería el tercer año consecutivo en el que el Gobierno no cumple su objetivo de reducir la cifra de muertos en un 40% para el año 2008”, añadió. “Y ello -a juicio de Arnaldo- debería llevar al Gobierno a un replanteamiento de su política de seguridad vial y a la sustitución de los responsables”.
Motoristas
Por otra parte, AEA ha recibido “con perplejidad” el anuncio del Gobierno de restringir el permiso de motocicletas de gran cilindrada a conductores con experiencia como si se tratara de una respuesta elaborada recientemente con el fin de reducir la alta siniestralidad de los vehículos de las dos ruedas en nuestro país.
Para A E A, no se trata de una medida original ya que “todas estas medidas que ha anunciado el Ejecutivo son una imposición de una normativa comunitaria aprobada el pasado año por el Parlamento europeo, y que va a obligar a todos los países de la UE a hacer una nueva clasificación por edades para acceder al permiso de conducir».
El Plan Estratégico de Seguridad Vial establece un objetivo general de reducción del 40% de los fallecidos en accidentes de tráfico (a 30 días) en el período 2005-2008, tomando 2003 como año base de referencia para el cálculo. Así, para llegar al año 2008 con un 40% menos de muertos (3.240 fallecimientos en todas las vías, frente a los 5.399, que se registraron en 2003) se debería reducir el número de fallecimientos un 9,7% cada año.