Estos días, por desgracia, he tenido que conducir en horas punta y hacer ratos de retenciones. Mirando a la gente de los otros vehículos para pasar el aburrimiento me he dado cuenta que hay muchísima gente que lleva el reposacabezas mal regulado, tanto conductores como acompañantes.
Hay un estudio de la Fundación Mapfre y desarrollado por el Centro de Experimentación y Seguridad Vial de Mapfre (cesviamap) sobre este tema precisamente. Dice que más del 75% de los usuarios desconoce cómo colocarlo correctamente, el 40% lo lleva mal colocado y el 22% lo coloca de tal forma que pone en riesgo su integridad física.
Los expertos recuerdan que, para que el reposacabezas sea efectivo, la parte superior de este elemento debe estar más o menos a la altura de los ojos del conductor y a una distancia de la cabeza inferior a siete centímetros.. A su vez, la espalda debe estar apoyada en el respaldo del asiento, y es importante que la distancia de conducción sea correcta, de forma que al estirar los brazos hacia delante, las muñecas queden encima de la parte superior del volante.
El Reglamento de Vehículos a Motor define el reposacabezas como aquel “dispositivo cuyo objetivo es limitar el desplazamiento hacia atrás de la cabeza del ocupante en relación con el tronco, de modo que reduzca, en caso de accidente, el riesgo de heridas cervicales” Son muchas las heridas cervicales que se pueden producir, no obstante yo quiero hacer incidencia en este artículo en una en concreto, el latigazo cervical.
El término de esguince cervical, que en los últimos tiempos se ha dado en llamar latigazo cervical o whiplash, fue introducido en la literatura por Crowe, en 1928, en EE.UU. Esta lesión fue descubierta inicialmente como una patología propia de los pilotos de aviación sometidos a los asientos tipo «catapulta». También en sus orígenes, el trastorno era conocido como columna de los viajeros de tren, pues también ocurría con frecuencia a personas implicadas en accidentes ferroviarios en los inicios del siglo XX.
Permaneció olvidado hasta 1945, fecha en la que el norteamericano Davis resucitó nuevamente el término para designar las lesiones producidas en el raquis cervical en los automovilistas que sufrían una colisión trasera. Obviamente, desde esta fecha y hasta nuestros días este tipo de lesión forma parte del quehacer diario de los médicos y de especial manera de los especialistas en traumatología y neurocirugía; todo ello merced al incremento del parque automovilístico, lo que hace que el esguince cervical sea una lesión típica del siglo XXI (Galasko , et al. 1993).
El esguince cervical, como su propia denominación indica, se localiza en la zona cervical de la columna vertebral. Ésta es una zona anatómica del aparato locomotor que, al igual que el resto de la columna en general, ha de cumplir los parámetros básicos de flexibilidad al mismo tiempo que rigidez (óptima en la transmisión de fuerzas, aceleraciones y deceleraciones del centro de gravedad, etc.). A este nivel cervical, compuesto por siete vértebras (C1-C7), la columna describe una primera curvatura denominada LORDOSIS CERVICAL, filogenéticamente derivada de la mejor forma posible de transmitir las cargas y demás estímulos de estrés.
La explicación clássica del latigazo cervical explicaba que cuando un coche es golpeado por su parte posterior, sufre una aceleración hacia delante arrastrando con esta fuerza el cuerpo del conductor, mientras que la cabeza y el cuello se extienden hacia atrás como consecuencia de la inercia. Si tenemos en cuenta que la cabeza no encuentra tope alguno en la parte posterior, todas las estructuras anteriores del cuello pueden ser lesionadas. Una vez que la cabeza ha alcanzado su máxima extensión retrocede a la posición neutra, e incluso pasa a la situación de máxima flexión, encontrando en este recorrido el tope torácico, generalmente no da lugar a lesiones y cuando éstas ocurren es a expensas de las estructuras posteriores del cuello.
Os pongo una imagen que he encontrado que más o menos lo explica de forma gráfica.
No obstante, los estudios biomecánicos han desechado la explicación clásica de ‘latigazo’, en favor de una nueva hipótesis, más compleja. Dichos estudios biomecánicos, con videocámaras de alta velocidad, acelerómetros, cinerradiografía y electromiografía, han permitido obtener más detalles sobre los movimientos de la cabeza y del cuello después de una colisión, desembocando en una nueva hipótesis sobre los movimientos vertebrales en las primeras centésimas de segundo después del impacto: la primera respuesta del cuello, antes de que se desplacen las vértebras cervicales superiores y la cabeza, es el movimiento hacia atrás de la vértebra C6, hasta alcanzar su extensión máxima. Cuando la alcanza, fuerza a la vértebra C5 a extenderse. Es decir, que en esos primeros momentos las vértebras cervicales inferiores estarían extendidas mientras que las superiores estarían en una flexión relativa, dando a la columna cervical en conjunto una forma de S, como vemos en la figura adjunta de debajo. Después, el movimiento del tronco hacia delante continúa y la cabeza «se queda atrás», con lo que se extiende toda la columna cervical. A partir de aquí sigue el movimiento clásico de latigazo. Esa secuencia de movimientos anómala sería la causante de estas lesiones cervicales (Ortega A. 2003).
Bueno, queridos lectores, espero que a partir de este artículo entiendan un poco más el porqué se producen latigazos cervicales en muchísimos accidentes de tráfico. Además, por favor, espero que no estén dentro de ese 75% que no tiene ni idea de cómo colocar el reposacabezas, les recomiendo que cojan el manual de su coche y lean cómo se coloca. Si pueden y se acuerdan también repasen que los acompañantes que lleven también lo tengan bien colocado. Finalmente, espero que a partir de ahora se tenga más atención a este importantísimo elemento de seguridad.
Muy buen artículo, ya que la inmensa mayoría de la gente se piensa que este elemento solo es para poner la cabeza comodamente y estar como en el silló de su casa.
La DGT se tenía que dedicar mas a informar de estas cosas en vez de recaudar como salteadores de caminos…
Te lo has currado, buen artículo pero me has dejado con una duda ya que yo siempre lo he ajustado haciendo coincidir la parte alta del reposacabezas con la parte alta de mi chichonera en vez de tomar como referencia los ojos tal y como díces, es más, a mí me lo enseñaron así y en los cursillos del Jarama así lo transmiten a la gente los monitores, también se ha tratado el tema con gente de Luike Motor Press que se encarga del consultorio de revistas tales como Autopista, Coche Actual, etc. y su punto de vista coincide con el mío. Bien, tenemos una pequeña divergencia en ese punto pero por lo demás te ha quedado fenómeno el artículo, muy bien y a ver si la peña se mentaliza porque como tú bien has expuesto es patético observar a la gente y ver como llevan el reposacabezas. Saludos.
En el manual de mi autoescuela (de hace un par de años) dice:
«… Para un ajuste óptimo, la parte superior del reposacabezas debe estar a la misma altura que la parte superior de la cabeza, situándolo tancerca de ella como sea posible.
Es aconsejable una mínima distancia (aproximadamente 4 cm) por motivos de comodidad y libertad de movimientos de la abeza. si se ajusta por debajo de la nuca puede llegar a aumentar el riesgo de lesiones cervicales.»
Izan, ¿han cambiado la normativa y ahora se ajusta el reposacabezas como tú dices?
Por último, felicidades por el artículo, es muy muy interesante. Espero que escribas más en esta línea.
Un saludo.
Muchas gracias.
Hola José Luis i Motorlaz, muchas gracias por vuestras aportaciones, la verdad es que tenéis razón, el reposacabezas también se puede regular como vosotros puntualizáis. Yo solo publiqué esta porqué es la que me dijeron en un congreso que asistí hace poco precisamente sobre la rehabilitación de problemas en la espalda, aparte que luego consulte mi manual del coche o alguna otra página web como http://www.supermotor.com y coincidían con lo que he publicado. No obstante, después de vuestros comentarios me he informado y he visto que también se puede regular de esta forma, lo he visto en manuales de coches, en libros de autoescuela y también en otras páginas web. Así, que después de esto me entró la gran duda de cuál era la correcta manera de regularlo, si la que había publicado yo o la que puntualizabais vosotros.
Me puse en contacto con algún experto y la respuesta que he obtenido ha sido esta: (la copio literalmente).
“Ha de ir situado lo más cerca posible de la parte posterior de la cabeza. En concreto unos 4 cm como la distancia más adecuada.
A continuación se debe regular la altura; se pueden tomar dos referencias:
1. Elevarlo hasta que la parte superior quede a la misma altura que la parte superior de la cabeza del usuario.
2. La altura de los ojos (centro de gravedad de la cabeza) debe coincidir con la parte resistente del reposacabezas: para encontrarla, presione hasta encontrar la parte rígida.
Asegúrese de que queda bloqueado: incline la cabeza hacia atrás con decisión y compruebe que mantiene inalterable su posición. Debe colocar el respaldo del asiento adecuadamente, es decir, el ángulo de inclinación no debe superar los 25 grados. “
Bueno, creo que con esto queda ya un poco más aclarado el tema, no obstante, si alguien sabe de alguna información o estudio más reciente estaré encantado de que me lo haga saber. De todas formas, creo que lo mejor es hacerlo tal y como dice el manual de nuestro coche, ya que puede ser que segun el coche haya pequeños matices en cuanto a la colocación.
Saludos.
Muchas gracias.
Muchas gracias por el interés, Izan.
A fin de cuentas no es un tema trivial. Si no tenemos accidentes, no pasa nada. Pero si por desgracia tenemos uno, nos interesa minimizar las lesiones que suframos.
Hasta pronto.
Hola de nuevo, es un tema interesante y tan importante que es una pena que no se pase por aquí más gente a leer pero con que tan sólo una persona haya aprendido a subir el reposacabezas en vez de llevarlo a la altura de la nuca me doy por satisfecho pues esa mínima distancia es lo que puede convertir un alcance trasero de un simple dolor de cervicales y una semana con collarín a toda una vida en silla de ruedas. Saludos a todos.
Esto deberían enseñarlo en las autoescuelas, y la DGT en vez de gastarse el dinero en anuncios chorras tipo gore que a la postre solo sirven para asustar al usuario normalito (al descerebrado le va a entrar por un oido y salir por otro) podían hacer una serie de anuncios constructivos, donde se enseñe a medir la presion de las ruedas, a coger bien el volante (no a las 10 y 2 como enseñan en las autoescuelas que esta mal, sino a las 9 y 3 ) a regular el reposacabezas, etc.
Y estamos hablando que para que te salve las cervicales el reposacabezas no hay que tener un accidente de siniestro total, ni de ir a 200… un golpe de chapa en un alcance en un semáforo es suficiente para jolibiarnos el cuello.
A mí me ha salido hoy justo esa pregunta en el examen del carnet y ya me han puesto en duda. Decía que «la parte central del reposacabezas» debe colocarse:
a) a la altura de la nuca
b) a la altura de los ojos
c) da igual la regulación
obviamente, la c descartada, pero ya me ha hecho dudar. en la autoescuela me enseñaron la carrerilla de «la parte superior del reposacabezas debe coincidir con la parte superior de la cabeza», por tanto, la parte central yo la ubico más en los ojos que en la nuca. De hecho, si decís que la parte resistente debe estar a la altura de los ojos, presupongo que será la central…
el lunes os comento qué dice la dgt en los test oficiales 😉
PD: Muy currado el artículo 😀