Esta semana la AEC (Asociación Española de la Carretera) se ha reunido y ha organizado una rueda de prensa. El motivo era dar a conocer su propuesta, crear un “Bono de Movilidad” para cobrarnos por el uso de las carreteras. Vayamos desgranando por partes la información, porque hay mucha chicha en este tema. La idea central es sencilla, pagaremos en función de los kilómetros que vayamos a recorrer en un año. Hasta los 15.000 km anuales no pagaremos, pero de ahí en adelante sí.
Básicamente, pagaremos en función del uso que hagamos de la red viaria española. Estos bonos de movilidad tendrían una finalidad recaudatoria abierta, tal y como reconoce la AEC. La recaudación iría destinada a “defender el derecho a la movilidad y mejorar el estado de las carreteras“. Esta medida nace como respuesta a la reducción en infraestructuras con motivo del plan de reestructuración económica del Gobierno. Las estimaciones son de unos 20.000 a 25.000 millones de euros anuales.
Ahondando algo más en la cuestión del kilometraje, hasta los 15.000 km el uso de las carreteras sería gratuito, pero de ahí en adelante pagaremos el kilómetro a una cantidad aún por determinar, por tramos con casi toda seguridad. El director general de la AEC también reconoce que se podrían implantar medidas como la gratuidad de los kilómetros nocturnos o por el uso de carreteras secundarias. Para el transporte profesional, el límite de gratuidad del kilometraje es más alto, 100.000 km.
La AEC ve necesaria estas medidas porque reconoce que la carretera vertebra la economía española, y el Gobierno está invirtiendo más en infraestructuras ferroviarias. Para la implantación de esta medida, la AEC fija un horizonte temporal de cinco años, pues habría que legislar fuertemente al respecto, así como diseñar un sistema de localización por GPS para todos los coches, que registraría su posición y kilometraje. Esto choca con la privacidad, pero la AEC cree que se puede solucionar este problema.
Hasta ahora me he limitado a contaros la información que existe al respecto de la noticia. Mi opinión es que esta medida no tiene ni pies ni cabeza. En primer lugar, todos pagamos impuestos directos e indirectos para entre otras cosas, contribuir al mantenimiento de la red viaria. El mantenimiento de algunas autopistas incluso se lleva a cabo por las concesionarias, que cobran alegremente peajes si queremos rodar por esas vías, algunas de ellas vitales para la comunicación entre ciudades.
La instalación de GPS de monitorización en todos los coches ya me plantea aún más problemas, pues en mi opinión atenta contra la privacidad personal de manera directa. Y no nos podemos olvidar del argumento más importante, la carretera es una necesidad para todos nosotros, puede que tengamos que usarla todos los días para ir al trabajo o como los transportistas, sea nuestro medio de trabajo. Señores, ya pagamos suficientes – y crecientes – impuestos, y además ya tenemos peajes.
Desde aquí, me opongo firmemente a esta medida. Los grupos parlamentarios no se han pronunciado al respecto, aunque está en sus agendas dar una respuesta a esta cuestión, bastante candente. La AEC dice que los ciudadanos debemos ver esta medida como un “plus de calidad”, que contribuirá a mejores redes viarias, así como menos congestionadas. Es hora de que nos déis vuestra opinión, con respeto y fundamento en la sección de comentarios.
Nota: la Asociación Española de la Carretera es una entidad de utilidad pública sin ánimo de lucro, fundada en 1950 con el objetivo – estatutario – de promover y defender el uso de las carreteras. No tiene relación con el Gobierno o la DGT.
Fuente: Diario Motor
Como si las carreteras no las pagásemos con nuestros impuestos… ¿Y que pasa con el impuesto de circulación? también pago al año… por nada ¿Y por qué un impuesto para los que anden por las aceras? ¿O por respirar? sinceramente, las cosas que hay que oír que se le ocurren a unos drogadictos del dinero fácil para seguir con sus historias.
Sinceramente me parece el enésimo globo sonda o la última «gilipollez» de unos gobernantes que han perdido la cabeza.
Los que tenemos que hacer kilómetros por «cojones»,es decir, para trabajar, ya pagamos injustamente muchísimo más en impuestos indiretos a través de la gasolina, peajes, etc…. Si hacemos las cuentas en 70.000 km/año la cuenta es escalofriante. Y ese dinero sale de nuestros bolsillos.¿Además, ahora, por km. recorrido?
A alguien habrá que preguntarle «cuanto dinero hay que facturar mensualmente para que ir a trabajar salga rentable», porque decir y proponer chorradas es fácil si no se someten a un estudio mínimamente serio y riguroso.
O es viable, y esto es imposible que lo sea, y por lo tanto que se callen y nos dejen en paz de una vez. O si es viable, que me lo expliquen despacito y con buena letra, porque yo debo de estar gilipollas perdido.
Se va (nos vamos) otro montón de gente al paro si lo implantan.
Porque esto de «el transporte profesional hasta 100.000 km.»… ¿que profesionales?