Condenado por multarse a si mismo para librarse de otra multa

El Tribunal Supremo (TS) ha reducido a tres años de cárcel la pena impuesta por la Audiencia Provincial de Huelva a un
agente de la Policía Local de Lepe que falsificó la documentación de una multa de aparcamiento para eludir otra que le
fue impuesta por la Guardia Civil por adelantamiento indebido.

El policía trató de demostrar que su vehículo había sido retirado por la grúa y estaba en el depósito, por lo que era un error que el coche estuviera circulando por la carretera. El alto tribunal ha confirmado el delito de falsedad documental
cometido por el funcionario público pero no aprecia una continuidad delictiva, como sí sentenció la Audiencia, por lo
que reduce a tres años de cárcel la pena de cuatro años y medio que le fue impuesta inicialmente.

Asimismo, deja en tres años la inhabilitación para el empleo público -frente a los cuatro que le impuso el tribunal onubensey le reduce la multa, de quince euros diarios durante quince meses, a ocho euros al día durante seis meses.

La Audiencia consideró probado que el policía simuló que el 25 de febrero de 2009 había sido denunciado por los agentes municipales por aparcamiento indebido de su coche en una calle de Lepe y rellenó los impresos oportunos de esa denuncia, los de que el automóvil había sido retirado por la grúa municipal y llevado al depósito, así como la carta de pago al Ayuntamiento por la multa, el servicio de grúa y dos días de estancia en dicho depósito.

El TS considera que no hubo una continuidad delictiva porque pese a que los documentos que confeccionó el acusado se
hicieron con “un único objetivo, engañar a la Jefatura Provincial de Tráfico”, ve “factible y probable” que se rellenaran “en un solo momento” debido la “inmediatez” que requeriría el acto.