Muchas de las nuevas tecnologías de seguridad y de ayuda a la conducción que incorporan los vehículos se basan en sistemas de reconocimiento de distintos elementos que componen la carretera como marcas viales y señales. Se calcula que para el año 2025 la mitad de los coches en toda Europa serán capaces de reconocer las señales y marcas viales.
Un reciente informe publicado por EuroRAP (la organización europea para la evaluación de las carreteras) y EuroNCAP (el programa europeo de evaluación de automóviles nuevos) pone de manifiesto las dificultades que para estos sistemas de seguridad supone el mal estado de conservación de las señales y las marcas viales sobre todo en carreteras secundarias.
En el informe llamado «Carreteras que los coches puedan leer» se señala que la mayoría de las muertes en carretera se producen en estas carreteras secundarias. Allí donde estos nuevos sistemas de seguridad podrían resultar más útiles, el precario mantenimiento de marcas viales y señales de tráfico se convierten en un gran obstáculo para la eficiencia de la alerta de cambio o salida de carril o el reconocimiento de señales de tráfico.
En el informe se señalan los principales factores que afectan al reconocimiento de marcas viales y señales y las propuestas que, según sus criterios avalados por asociaciones de fabricantes, son necesarias para garantizar una correcto funcionamiento de estos sistemas en toda Europa.
Las propuestas para mejorar el reconocimiento de marcas viales son:
– Necesidad de que el mantenimiento de las marcas viales sea una prioridad. Que todas las vías estén debidamente marcadas y se mantengan claramente visibles.
– Usar marcas de retroreflectantes que sean visibles en todas las condiciones climáticas. Para ello la European Road Federation (ERF) ha definido unos estándares de rendimiento en condiciones secas de 150 mcd/lux/m² y que tengan un mínimo de 150 mm de ancho.
-Armonizar el color y las dimensiones de las marcas en toda Europa.
Las propuestas para mejorar el reconocimiento de señales son:
– Armonización de las principales señales de tráfico, por ejemplo: Stop, ceda el paso o dirección prohibida en toda Europa en cuanto a colores, formas y tipos de letra.
– Elaboración de directrices de buenas prácticas en la colocación de las señales: posición, numero de señales, ángulo, etc…
– Uso de materiales más duraderos que no pierdan su capacidad de visibilidad con el paso del tiempo.
– Mantenimiento adecuado y periódico de las señales.
– Las señales de tráfico variables deben ser desarrolladas para ser leídas tanto por los usuarios como por las cámaras de los vehículos.
Fuente: Tecnocarreteras