Hoy se ha dado a conocer el dato del IPC adelantado del mes de julio, registrando una tasa negativa anual del -0,3%, lo que supone una disminución de cuatro décimas en su tasa anual. Respecto al mes de junio, los precios de consumo registran una tasa del -0,9%.
Con los datos del mes de julio, ya son once meses consecutivos con tasas muy bajas de IPC, que son reflejo del deterioro del consumo y de las políticas que están llevando al empobrecimiento paulatino de la clase trabajadora.
Por muchas cifras positivas y optimistas que viciosamente se quieren presentar, la bajada generalizada de los salarios, las insistentes legislaciones que han construido un mercado laboral precario e inestable, y los casi dos millones de hogares con todos sus miembros en paro, evidencian un estancamiento de la economía real, que sigue en negativo.
El Gobierno no está dedicando los esfuerzos necesarios para desarrollar iniciativas de estímulo al consumo. Desde USO, apostamos por la construcción de un mercado laboral estable, con legislaciones que garanticen el empleo de calidad y estable y salarios dignos, además de un urgente cambio de política económica que apueste por un estímulo eficaz de la demanda interna y en el que el crédito llegue a las empresas, autónomos y particulares.