El fabricante británico Jaguar Land Rover ha desarrollado un dispositivo, llamado Bike Sense, que detecta la aproximación de ciclistas o motoristas y avisa al conductor, mediante señales acústicas, visuales o táctiles, para evitar colisiones o atropellos. El sistema cuenta con unos sensores capaces de detectar la aproximación de otro usuario de la vía, de identificar si se trata de un motorista o ciclista y de alertar al conductor, si se trata de un usuario de un vehículo de dos ruedas, de un potencial riesgo de accidente.
Reproduce una vibración en el hombro para alertar de un adelantamiento
Esta tecnología emite luces y sonidos específicos, un sonido similar al timbre de una bicicleta o a la bocina de una moto, que hacen que el conductor asocie instintivamente con un peligro potencial. Además, en caso de que el vehículo de dos ruedas se aproxime por detrás y proceda al adelantamiento, el Bike Sense ejecutará una vibración en uno de los hombros del conductor, en función del lado por el que se esté llevando a cabo esta maniobra, mientras que una matriz de luces LED se iluminará, primero en ámbar y luego en rojo, cuando la distancia sea mínima.
Evita atropellos
Igualmente, este dispositivo es capaz de detectar peligros que el conductor no ve, como un peatón o cicilsta cruzando la carretera oculto a la vista por un vehículo. En el caso de que se ignoren las advertencias, el sistema hará que el pedal del acelerador vibre o permanezca rígido.