Conseguir mejorar la seguridad vial en las ciudades, reduciendo el número de accidentes y atropellos en las mismas, es un objetivo común en todo el mundo. Sin embargo, las medidas tomadas para este fin difieren bastante de unas zonas a otras.
Uno de los casos más curiosos lo tenemos en China, donde los responsables del tráfico de la ciudad buscan conseguir concienciar a los ciudadanos de la necesidad de respetar semáforos y señales señalándolos públicamente cuando no lo hacen.
Entre otras, las medidas tomadas son las siguientes:
- Identifican la cara de peatones que pasan semáforos en rojo, luego las muestran públicamente en marquesinas de la ciudad.
- Se multa y cobra automáticamente a los conductores que hacen infracciones.
- Si cometen infracciones más graves, o de forma más continuada, pueden llegar a perder el trabajo.
En definitiva, está muy extendido en ese país la cultura del escarnio público para evitar que los ciudadanos tengan tentaciones de saltarse las leyes, y conseguir mejorar la seguridad en sus ciudades.
Fuente: Tecnocarreteras