Coches que frenan solos, que guardan la distancia de seguridad, que ‘ven’ a un peatón en la oscuridad, que nos avisan si estamos cansados, que nos indican que vamos a circular por una vías en obras… Y además, son capaces de comunicárselo a los coches que circulan detrás para que tengan tiempo de reaccionar; o avisan a la central de emergencias si hemos tenido un accidente. También, si la colisión es inminente, pueden frenar automáticamente o mover el volante para evitarlo. Son algunas de las nuevas tecnologías que ya equipan los nuevos modelos o que estarán disponibles en los próximos años. Su objetivo es evitar los accidentes o reducir la gravedad de sus consecuencias.
Todos los fabricantes están trabajando en ello. Volkswagen habla de ‘Visión Zero’ y desde Volvo aseguran «que su objetivo es que en 2020 ningún ocupante de uno de sus modelos resulte muerto o herido en caso de accidente». En un informe de Anfac (la asociación que engloba a la mayoría de los fabircantes) y la empresa Bosch, se repasan algunos de los sistemas más importantes y se asegura que el sistema de mantenimiento de carril podría reducir hasta un 25% los accidentes por salida de la vía, el detector de fatiga evitaría los 112 muertos por cansancio al volante que se registraron en 2011, o el ACC (Control de la distancia de seguridad) podría evitar más de 14.000 accidentes de tráfico. El principal problema, según Anfac, es que la mayoría de estos equipamientos está disponible casi exclusivamente como una opción y para el segmento de lujo, y con un precio muy alto. Según el infrome ‘El coche del mañana’ realizado por el portal de automoción AutoScout24: «el 43% de los encuestados está dispuesto a invertir más en seguridad, mientras que un 42% considera que los costes actuales son apropiados».
Coches más antiguos = mayor riesgo
Los expertos subrayan que la clave para que los coches ayuden a reducir los accidentes está en la renovación del parque. En estos momentos, casi la mitad de los vehículos que circulan tiene más de 10 años. Según la Dirección General de Tráfico, el riesgo de fallecer o resultar herido grave se multiplica por dos al comparar los accidentes ocurridos en vehículos de menos de 5 años, con los que tienen más de 15.
