Todos los fines de semana de los meses de junio, julio, septiembre y octubre, la Dirección General de Tráfico ha ordenado a sus agentes la vigilancia especial de ciudadanos motociclistas. Algo que, desde los años 50 del siglo pasado, solo encuentra sus antecedentes históricos en el año pasado 2024 y que, como resultado del modelo de fracaso del análisis científico de los accidentes de motociclistas y sus factores vinculantes, se incrementó la siniestralidad mortal de motociclistas respecto a años anteriores.