Convertir las tradicionales balizas que se colocan en las carreteras para iluminar y señalizar zonas concretas, por sistemas inteligentes, es el objetivo de la empresa israelí Valerann.
Su producto, que ya se está colocando en autopistas de Tel Aviv, bajo la apariencia de una baliza tradicional, integra unos sensores capaces de informar sobre diferentes aspectos del tráfico o la meteorología (por ejemplo, detectando la presencia del temido “hielo negro”), que pueden resultar de gran utilidad a los conductores.
El sistema también ofrece la utilidad original de las balizas, pero añadiendo unas funcionalidades que cada vez son más demandadas en el camino a la carretera inteligente, y pudiendo también ofrecer información “bajo demanda”, por ejemplo, parpadeando cuando desde la central se detecta que hay algún problema con el tráfico o circunstancia adicional.
En definitiva, se trata de dotar también a la infraestructura de sistemas tecnológicos capaces de responder a las nuevas necesidades, y ofrecer una información más útil a conductores y usuarios de las carreteras.
Fuente: Tecnocarreteras