Conseguir unas carreteras donde los ciclistas se sientan más seguros es el objetivo del Sistema Active Cyclist Detection, un proyecto liderado por Raúl Gómez (Insegsa Ingeniería Preventiva) y que cuenta con el apoyo de la Fundación Mapfre y la Fundación Michelín. El objetivo es evitar los accidentes que ocurren por despistes, o por un exceso de velocidad en los conductores, consiguiendo que al menos extremen la precaución cuando hay un potencial peligro.
El proyecto, que se encuentra en fase piloto, consiste en unos sensores en la carretera que detectan cuando por ella va circulando algún ciclista – debido a su menor velocidad – y automáticamente activa las señales luminosas que permiten informar a los conductores cercanos de que hay ciclistas por esa zona, para que puedan extremar la precaución.
En el siguiente vídeo se muestra el funcionamiento del sistema:
Fuente: Tecnocarreteras