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Llega la temporada invernal y es necesario tomar algunas precauciones extra, como la de introducir en el coche ciertos productos imprescindibles. Desde la revista online AutoFacil nos informan de siete productos que pueden ser bastante interesantes para llevar en el coche en estas fechas invernales. Algunos de ellos como el repelente de lluvía y el antivaho ya los he probado yo y funcionan perfectamente.

Aunque los finalistas se dieron a conocer el día 26 de Noviembre, he esperado hasta primeros de año para recordar la lista de los que van a competir por ser coche del año 2019, entre ellos uno será el ganador. Este premio Coche del Año en Europa se concede desde 1964 y está compuesto por un jurado de 60 periodistas de los cuales seis de ellos son españoles.

Son denominados “microcoches”, pertenecen a la categoría de cuatriciclos ligeros. Su velocidad no es mayor de 45 km/h y su cilindrada no supera los 50cc. En el caso de los eléctricos, la potencia máxima neta no supera los 4 KW. Gracias a su fácil conducción y tamaño, son los preferidos por los jóvenes.

El coche eléctrico lo quieren imponer a toda costa, lo pintan muy bien pero actualmente tiene una serie de problemas que parece que no salen mucho a la luz. Posiblemente no interesa, ahora mismo el gobierno mas parece que esta a cargarse lo que tenemos y luego ya se verá, me recuerda a cuando la desindustrialización de los años 80, primero se desindustrializa y luego que cada cual se busque la vida.

El Seat 600 es la versión española del Fiat 600, lanzado en Italia en 1955. Seat conseguiría la licencia de fabricación para España y lo ensamblaría en la fábrica de la Zona Franca, en Barcelona. Se puso a la venta el 27 de junio de 1957 con un precio de 70.000 pesetas -a partir de otoño de 1962, desde 65.000 pesetas-. Era un utilitario de 4 plazas -rival del Citroën 2CV, Renault 4…- que se dejó de fabricar en agosto de 1973.

Supongo que a estas alturas de la película deberiais saberlo todos, pero por si acaso os comento una serie de casos en los que el seguro del coche, sea a terceros o a todo riesgo, se pague lo que se pague, no os va a cubrir en caso de siniestro. Yo creo que todos ellos son lógicos pero posiblemente se de el caso de que no somos conscientes de que hay tantos casos en los que no va a cubrir.

Encender un cigarrillo lleva 4,1 segundos, lo que implica que, circulando a 100 km/h, se recorren 113 metros sin la atención plena en la carretera. Fumárselo requiere unos tres o cuatro minutos, es decir, «seis kilómetros con una sola mano bien colocada en el volante, lo que en situaciones normales ya es peligroso de por sí», indica el doctor José Luis Díaz Maroto, coordinador del grupo de trabajo de tabaquismo de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen).

Inundaciones, granizadas, lluvias intensas…el otoño se ha hecho notar en estos últimos días con sus inclemencias meteorológicas, sobre todo en el sur y en las islas Baleares. En ocasiones, los vehículos también sufren sus efectos en su propia chapa. Cuando esto ocurre, ¿sabe el conductor qué hacer y a quién recurrir para que se haga cargo de estos daños que no suelen cubrir nuestras pólizas de seguros?.

El GLP o gas licuado del petróleo es el combustible ecológico más consumido del planeta con cerca de 25 millones de vehículos adaptados para su uso, casi la mitad de ellos en Europa. En España, sin embargo, su uso es mucho más reducido, a pesar de que cada vez más estaciones de servicio lo ofrecen en sus surtidores y la oferta de coches es cada vez mayor.

Esto es lo que debió pensar el que estaba organizando la carga en la baca del coche, venga, dale, que cabe mas, no te cortes. Por otra parte no es por pensar mal, a nosotros nos multan a la minima y aquí tenemos a personal como este que igual resulta que se cruza España sin que nadie le diga nada, ya se que es pensar mal, pero tambien nos tienen acostumbrados al piensa mal y acertarás, asi que no me parece incorrecto el hecho de andar pensando mal.

El sistema de frenos se compone de una serie de elementos que trabajan en conjunto para detener el vehículo cada vez que haga falta con la efectividad necesaria. Dichos componentes se adaptan a la potencia y prestaciones del coche. Si bien en todos los vehículos son básicamente los mismos elementos, un utilitario ligero y poco potente no tiene las mismas exigencias para detenerse que un deportivo capaz de unas elevadas prestaciones, o un SUV grande, que superará de largo las dos toneladas y medio de peso en orden de marcha.